Capítulo tercero

CAPÍTULO TERCERO

IMPRESIONES PERMANENTES OBTENIDAD DE PIES Y MANOS- PROPUESTA DE EXPERIMENTO QUÍMICO - VISIÓN ANORMAL DE SLADE - IMPRESIÓN EN UN ESPACIO CERRADO - ENCERRADO EN UN ESPACIO DE TRES DIMENSIONES Y ABIERTO A LA CUARTA - SERES DIMENSIONALES



Como casi con regularidad en todas las sesiones ( mientras que las manos de Slade descansaban sobre la mesa, visiblemente a todos los presentes, igual que sus pies, en la parte del lado con frecuencia mencionada, en cualquier momento podían ser observados) sentimos toques de manos bajo la mesa y por encima, comentamos, que hasta habíamos visto estos transitoriamente en las mismas condiciones,  deseé instituir un experimento por el cual obtener pruebas convincentes de la existencia de éstas manos. Por lo tanto propuse al Sr. Slade colocar bajo la mesa un florero de porcelana plano, lleno hasta el borde con harina de trigo, y que él entonces solicitara a su “espíritus” que pongan sus manos sobre la harina antes de tocarnos a nosotros. De esta manera deben mostrarse los rastros visibles de los toques sobre nuestras ropas después del contacto, y al mismo tiempo las manos de Slade y pies podrían ser examinados para ver si había restos de harina pegados a ellos. Slade se declaro inmediatamente listo para la prueba propuesta. Traje un tazón grande de porcelana de diámetro aproximadamente un pie y dos pulgadas de hondo, lleno uniformemente, a rebosar con harina, y lo coloqué bajo la mesa. No nos preocupamos al principio del éxito eventual del experimento, pero continuemos más de cinco minutos los experimentos magnéticos, las manos de Slade estuvieron todo el tiempo visibles sobre la mesa; cuando de repente sentí agarrada poderosamente mi rodilla derecha y apreté a una mano grande bajo la mesa, aproximadamente durante un segundo, y tal vez, como

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FÍSICA TRASCENDENTAL.

mencioné esto a los demás y estuve a punto de levantarme, el tazón de comida fue empujado delante de su posición inicial, unos cuatro pies del mismo. Sobre mi pantalón tenía la impresión de la harina de una mano grande y fuerte, sobre la superficie de la comida del tazón fue marcado un pulgar, y cuatro dedos con todos los detalles de estructura con los pliegues de la piel impresionados. Un examen inmediato de las manos y pies de Slade mostró que no había rastros de harina, y la comparación de su propia mano con la de la impresión sobre la comida demostró que era más pequeña. La impresión está todavía en mi posesión, aunque por las frecuentes sacudidas las líneas débiles se van borrando gradualmente por que caen las partículas de comida.

Slade estuvo sumamente contento del éxito de los experimentos magnéticos, en particular por la magnetización de la aguja de hacer punto, una tentativa que nosotros a menudo repetíamos al día siguiente, siempre con un resultado parecido. Él expresó un feliz entusiasmo, gradualmente haciendo aquellos experimentos que yo había preparado desde el punto de vista de mi teoría de un espacio de cuatro dimensiones. Desde los experimentos magnéticos habían demostrado que existían influencias alrededor de Slade, las corrientes moleculares, presentes en todos lo cuerpos, podrían ser la causa del giro, es decir, cambiando de posición (Según la teoría de Ampere y Weber dependen principalmente de la magnetización de los cuerpos), mantuve la esperanza de que un experimento indicado en el primer volumen de mis Tratados Científicos, tuviera éxito; viz. La conversión, por una cuarta-dimensionalidad de la dispersión de moléculas de ácido tartárico que desvía a la derecha el plano de la luz polarizada, en el ácido racemico que desvía la luz hacia la izquierda. Para éste fin, yo había guardado una preparación de Mitchell polarización simple y medida con un  sacarinómetro, el tubo el cual contuvo una solución de ácido tartárico. La desviación del plano

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VISIÓN ANORMAL


de polarización ascendió aproximadamente 5º. Quise que el tubo de cristal (200 milímetros y 15 de diámetro externo), estuviese lleno de la solución, y fuera puesto sobre la pizarra, y ésta fuera sostenida sobre la mesa por Slade, como en el caso de las agujas de hacer punto para ser magnetizadas; con la expectativa de que después del experimento yo debería ver que el ácido tartárico ha cambiado a ácido racémico. Deseé primero explicar al Sr. Slade el significado del experimento, comencé por indicarle el aparato en si, después de quitar el tubo, el efecto óptico de las prisma cruzados de Nicol. Le explique, que sentado en la silla, para fijar su ojo en el prisma delantero, y luego mirar con el aparto al cielo claro (el experimento ocurrió en mi casa a las 11.45 de la mañana del 14 de diciembre de 1877), mientras que despacio giraba el frente Nicol. Ahora le dije a Slade, que cuando los dos prismas estén cruzados, si él observa un oscurecimiento gradual del campo de visión. Para mi sorpresa él dijo que no. Supuse, que era afectado por la luz que entraba por lado, y por lo tanto los prismas estaban en frente perpendicularmente, ni yo ni mis amigos podríamos ver nada en absoluto. Slade todavía afirmaba que él no percibía la menor parte de cambio de claridad del cielo; y como prueba él leyó unas palabras en ingles escritas y colocadas delante de los dos prismas de Nicol cruzados, habiendo tapado su ojo izquierdo, como nosotros pudimos ver, con su mano izquierda. Sin embargo, no fui contentado por esta prueba. A la mañana siguiente, cuando otra vez fuimos a mi casa, yo tenía unos prismas de Nicol muy grandes (para tener un mayor campo de visión y poder girar uno sobre el otro, con una pantalla grande circular que completamente cubría la vista del observador, y colocado en conexión con los prismas, de manera que los objetos externos sólo podría ser percibidos a través de los dos prismas de Nicol. Entonces tomé un libro en ingles, Tyndall's Faraday as a Discoverer, y en ausencia de Slade marqué unas líneas, las siguientes palabras en la página 81:- “La explosión de poder que había llenado los cuatro años precedentes de una cantidad de trabajo experimental sin par en la historia de la Ciencia.” Cuanto otra vez hice mirar a Slade por los prismas de Nicol al cielo, y declaró como un día antes, comentó que

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FÍSICA TRASCENDENTAL.

no veía el más mínimo cambio de claridad en el cielo cuando los prismas estaba cruzados, entonces solicité que se sentara en una silla, y me leyera las palabras subrayadas del libros, sostenido a una distancia aproximada de dos pies de su vista. Con gran asombro para todos nosotros, él inmediatamente leyó las susodichas palabras con una exactitud perfecta. Cuando, aproximadamente diez minutos más tarde, sostuve los dos prismas cruzados otra vez, ante el ojo de Slade, él no fue capaz de ver y el experimento no fue acertado por la tarde del mismo día a la luz de las velas. Él me informó que por la mañana, poco después del experimento en cuestión, él había percibido una “influencia” a la que atribuyó el cambio en su condición. En conexión con lo citado, el Catedrático Fechner, en referencia al cambio de la condición magnética de los sensibles, esta alteración de los poderes ópticos de Slade puede ajustarse como una confirmación interesante del carácter transitorio de tales funciones orgánicas anómalas. El experimento mencionado inicialmente con el ácido tartárico fue abandonado a consecuencia de las susodichas observaciones extraordinarias. Intentaré realizar una futura investigación de las particularidades de Slade.


El 15 de noviembre de 1877, a las once de la mañana, nos reunimos otra vez en mi casa. Mientras nosotros tomábamos un pequeño desayuno, estando de pie en mi taller, yo me dirigía a Slade cerca de mi estante, aproximadamente a veinte pies de la estufa, donde estaba el experimento de los prismas cruzados de Nicol (el que Slade designó como “un experimento de clarividencia”), de repente cayó allí del techo un pedazo de carbón del tamaño de un puño. Un incidente similar pasó media hora más tarde, cuando mi compañero Scheibner, en conversación con Slade, estaba a punto de dejar el salón; un trozo de madera, en vez de carbón, cayó del techo. La mañana del 11 de diciembre cuando tuvimos la conversación, después de la sesión, y estaba de pie, cerca de Slade, de repente, vimos mi cortaplumas, por suerte cerrado, volando por el aire y golpeando en la frente de mi amigo Scheibner, con alguna fuerza, la cicatriz permanecía visible un días después. Desde este momento del incidente, yo conversaba con Slade

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IMPRESIÓN DE UN PIE.

 estaba de espaldas a mi amigo, a una distancia de uno diez pies, el Sr. Slade, por lo menos, no pudo haber lanzado el cortaplumas a la cabeza de mi amigo. Sólo cito este incidente porque me parece que pertenece a la misma clase de hechos antedichos.

Aquellos experimentos me parecen que son bastantes interesantes, sin embargo, las impresiones permanentes por contacto fueron olvidadas, como fue el caso de la impresión de la mano en el tazón de harina.

Con esta idea pegué media hoja de papel común para cartas sobre una tabla de madera, un poco más grande, esto fue cubierto con una caja de madera, en la que Herr Merz me había enviado algunos prismas grandes para que los utilizara en espectroscopia de Munich, cuatro días antes. Moviendo el papel por encima de la lámpara de petróleo, sin el cilindro, se formó en él una capa de hollín (lámpara negra) y luego fue colocado debajo de la mesa, donde W. Weber, Slade y yo estábamos sentados. La esperanza era obtener sobre el papel la impresión de la mano, como en el día anterior, al principio dirigimos nuestra atención otra vez a los experimentos magnéticos. De repente, la tabla fue empujada adelante, con fuerza, a una distancia de un metro de la mesa, y sobre él apareció la impresión de un pie izquierdo desnudo. Inmediatamente pedí a Slade que levantara ambos pies para verlos. Él hizo esto de buena gana; después de que se quitara los zapatos, examinamos minuciosamente cualquier partícula de hollín que se le hubiera pegado, pero sin encontrar nada por el estilo. Entonces le hicimos poner su pie para medirlo, y se encontró que la longitud de su pie desde el talón hasta el dedo grande del pie era de 22.5 centímetros, mientras que la longitud de la impresión del pie entre las mismas partes solo ascendió a 18.5 centímetros.

Dos días mas tarde, el 17 de diciembre de 1877, a las ocho de la tarde, repetí este experimento, sólo con la diferencia de que esta vez la tabla de 4.6 centímetros de largo, por 22 de ancho por las pizarras usadas, donde la superficie no cubierta por el marco era de 15.5 centímetros de ancho por 22 de largo. Sobre esta superficie no cubierta por el marco pegué media hoja de papel para cartas, del tamaño de las mismas dimensiones. Inmediatamente antes de la sesión, yo mismo, en presencia de testigos puse el papel encima para el hollín

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FÍSICA TRASCENDENTAL.

como lo descrito. La pizarra entonces, fue como antes con la tabla puesta bajo la mesa donde nos sentamos, con el hollín hacia arriba. En un abismo dado, nos levantamos aproximadamente después de cuatro minutos, y sobre la pizarra fue otra vez impresionado el mismo pie izquierdo que nosotros habíamos obtenido dos días antes en la tabla. He tenido esta impresión reproducida fotográficamente.

Supe posteriormente, de mi compañero Canciller Thiersch, que el método de tomar impresiones de miembros humanos sobre papel con hollín, con frecuencia había sido utilizado con objetivos anatómicos y quirúrgicos. En el juicio de Herr Thiersch, quien había tomado gran número de tales impresiones, de pies de diferentes personas para compararlos con los obtenidos por nosotros, la impresión producida en la presencia del Sr. Slade, era el pie de un hombre fuerte, y había sido comprimido por la forma de un zapato, pero como a menudo pasa, un dedo del pie es presionado sobre los dos próximos, y así sólo cuatro dedos del pie tocaban la superficie de manera que el hollín aparece la forma del pie, como si fuera una fotografía. Herr Thiersch me mostró la impresión de un pie humano en el que de la misma manera solo  cuatro dedos del pie aparecían señalados.  Para fijar estas impresiones suaves, el requisito era pasarlos por una solución alcohólica de shellac. Con la referencia de la longitud más pequeña del pie en proporción con su anchura, Herr Thiersch comentó que esto podría ser efectuado por no dejar el talón y las partes del pie al mismo tiempo. De hecho, él me mostró una impresión de un pie en el que su abreviatura era casi similar, y producida de este modo. Si estas observaciones fueran ciertas, el Sr. Slade, hubiera producido la impresión al poner su pie de esta forma, primero debe asumirse que fue capaz de retirar sus zapatos, sus calcetines, sin usar las manos ( mientras que todo el tiempo estuvo observado por nosotros en la mesa) y, en segundo lugar, que él es un experto en la imposición de su pie en un espacio muy limitado ( la superficie de la pizarra), que , sin ver esta superficie, siempre cuadró las cosas y con exactitud. Esto seguramente, presupondría la práctica intencionalidad de Slade, y si es así, debe ser tenido en cuenta que



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SLADE NO ES UN EXPERTO.

él habría que haber actuado así. Dejando de lado su alegría y seguridad, tales fenómenos no habían sido observados en su presencia (*) hasta hoy día, y no tengo constancia de ninguna publicación respecto a las manifestaciones de Slade (**). Fue propuesto que Slade tenía cortados los calcetines por abajo – esto fue conjeturado por los “hombres de ciencia” en Leipsic, quienes en cosas importantes aceptan nuestras observaciones físicas con confianza absoluta, pero en referencia a lo anterior, no han vacilado en instruirnos en reglas elementales para observaciones exactas – pero como ya he mencionado, nos satisfacimos inmediatamente después del experimento.


Mientras tanto, para aclarar todas las dudas (y las tentativas de explicaciones, son apenas menos maravillosas que los mismos hechos), propuso al Sr. Slade un experimento, según la teoría del espacio de cuatro dimensiones, que fácilmente podría tener éxito. De hecho, si los efectos observados por nosotros provienen de un lugar ocupado por seres inteligentes (welche sich befinden) de un espacio absoluto, los sitios de la cuarta dimensión estarían cerca de los sitios ocupados por el Sr. Slade y nuestro espacio de tres dimensiones, (***) por lo tanto

(*) Referente a esta declaración, el traductor puede comentar que él ha tenido muchas sesiones con Slade, anterior a ésta época, y ha recibido cartas de los fenómenos ocurridos en presencia de muchos quienes han tenido experiencias iguales o mayores, y ha leído sus relatos; aún, los susodichos, y casi todos los experimentos especiales descritos en el texto (por el Catedrático Zöllner) son primicia de él.

(**) Para apreciar la importancia de esto, de que Slade sea un experto, es necesario tener en cuenta los muchos años que ha estado siguiendo su vocación de médium en light y otras publicaciones, además de diarios Espiritualistas (bastantes numerosos) de América e Inglaterra, habiendo impreso innumerables sesiones. TR.

(***) El concepto de la yuxtaposición de diferentes regiones, infinitamente extendidas en el espacio (Raumgebiete) necesariamente presupone el concepto de la proximidad de una dimensión superior del espacio. Así la 2-dimensional para ser verdad podría concebir un número infinitas de líneas paralelas directas; es decir los espacios infinitamente ampliados (Raumgebiete)  de una dimensión, pero en un plano finito que es donde se mueve, como nosotros con nuestros cuerpos en el espacio infinitamente ampliado tridimensional, podríamos representar de una sola vez, aunque nosotros, como seres tridimensionales, sabemos que allí hay un número infinito de planos paralelos extendidos, que según una dirección perpendicular, es decir la tercera dimensión puede organizarse de ésta forma.

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FÍSICA TRASCENDENTAL.


necesariamente invisibles a nosotros, de manera que para estos seres, una figura de un espacio inferior, en este caso de un espacio tridimensional, incluido todos los bordes, les sería fácilmente accesible como para nosotros , seres tridimensionales lo sería la superficie incluida sus bordes por una línea – una figura de dos dimensiones. La 2-dimensión puede ser representada por una línea recta y otra perpendicular (normal) a una línea recta del espacio, que en conjunto forma el lugar geométrico de dos dimensiones, que es el plano perpendicular a aquella línea recta. Análogamente podemos concebir un solo plano perpendicular; un ser de cuatro dimensiones, sin embargo, sería capaz de concebir infinitos planos perpendiculares a un plano, el conjunto está formado por el lugar tridimensional y en la cuarta dimensión estarían los planos perpendiculares a éste. En nuestra naturaleza de seres tridimensionales no podríamos formar ninguna representación de estas relaciones espaciales, aunque estemos en la mejor posición posible para descubrirlo  (begrifflich), la posibilidad de su existencia verdadera es por analogía. La realidad de su existencia solo puede ser revelada por los hechos observados.

Para obtener un hecho observado, tomé una pizarra doble, comprada sola; es decir dos pizarras unidas por un lado con bisagras, y se cierran como un libro. En ausencia de Slade rayé ambas pizarras por dentro, en los lados que se enfrentaban cuando se cerraban, y con media hoja de mi papel de cartas, que inmediatamente antes de la sesión fue extendida uniformemente una capa de hollín de la manera ya descrita. Esta pizarra fue cerrada y comenté al Sr. Slade mi teoría sobre la existencia de seres inteligentes de la cuarta dimensión en la naturaleza yuxtapuesta. Todos los planos representaría mundos infinitamente extendidos de dos dimensiones, cuyas presencias en cada región del espacio estarían separadas unos de otros, sin embargo, en ciertas condiciones anómalas, un ser de dos dimensiones, en un plano, podría conectar causalmente con otro ser de dos dimensiones de otro plano, así que estos seres por un movimiento, entonces podría producir efectos en una región de la tercera dimensión y produciendo efectos en una región de 2-dimensional, la región del primer plano, y esto le parecería maravilloso a los seres móviles y le aparecerán los maravillosos efectos atestiguados en la vecindad de Slade.

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UNA HIPÓTESIS Y UN EXPERIMENTO

Si esto estaba bien fundado, debería ser cosa fácil para ellos colocar en el interior de las pizarras cerradas la impresión de pies que hasta ahora solo habían aparecido en la pizarra abierta. Slade se rió, y pensó que sería absolutamente imposible, hasta sus “espíritus”, a los que les preguntó, parecían al principio perplejos con esta suposición, pero finalmente contestaron con precaución estereotipada “lo intentaremos”. Para mi sorpresa, consintió que la pizarra libro cerrada (que nunca se había separado de mis manos después de extender el hollín) estuviera en mi regazo durante la sesión, para que yo, continuamente pudiera observar al médium (*). Y nosotros nos habíamos sentado en la mesa de la habitación intensamente iluminada durante aproximadamente cinco minutos, nuestras manos estuvieron unidas a las de Slade de manera habitual, encima de la mesa, cuando de repente, sentí en dos ocasiones, una y poco después otra, que la pizarra hizo presión sobre mi regazo, sin que la hubiera perdido ni lo más mínimo de vista. Tres golpes sobre la mesa anunciaron que todo fue completado, y cuando abrí la pizarra, dentro en ella, sobre un lado había la impresión de un pie derecho, y en el otro lado el del pie izquierdo, y cierto es que era el mismo pie que habíamos obtenido en las dos tardes pasadas.

Mis lectores pueden juzgar para ellos igual que yo, después de la atestiguación de estos hechos, considerar a Slade impostor o prestidigitador. El propio asombro de Slade ante este último resultado era aún mayor que el mío propio. Independientemente de que mi teoría puede ser corregida con respecto a la existencia de seres inteligentes en un espacio 4-dimensional, en todos los acontecimientos de los que no se puede decir que son inútiles para tener pistas e investigar por los laberintos de los fenómenos Espiritualistas.

(*) En los anteriores experimentos de la tabla y la pizarra fueron puestas abiertas en el suelo bajo la mesa.

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