- Telepatía - Parte 2

Parte 1: Telepatía genuina
1. Telepatía Experimental

-W. W. Baggally –

SIR WILLIAM F. BARRETT, uno de los fundadores de la Sociedad para la Investigación Psíquica, hace más de cuarenta años intentó algunos experimentos que le condujeron a creer que había algo nuevo para la ciencia, él lo llamo provisionalmente “transferencia del pensamiento” y que ahora se conoce como “telepatía”.   
              En la primera reunión general de la Sociedad el 17 de julio de 1882, leyó un escrito titulado “Primer informe sobre la lectura de la mente”

              Desde esa fecha la Sociedad ha realizado una gran cantidad de experimentos que tienen como objetivo demostrar que la telepatía es un hecho científico. La evidencia de su existencia es grande,  se puede apoyar en experimentos y en manifestaciones espontáneas. A la primera categoría pertenecen los experimentos de transmisión de imágenes, dibujos o de diagramas; por medio de un esfuerzo de voluntad por una persona conocida llamada el emisor a la mente de otra persona llamada receptor , sucede cuando la transmisión se realiza de manera diferente a los canales ordinarios (los sentidos). A la segunda categoría pertenecen las alucinaciones que suceden en el momento de la muerte o de crisis, evidencias que han sido obtenidas abundantemente por la Sociedad de Investigación Psíquica e incorporadas al trabajo de Fantasmas Vivos [
Phantasms of the Living] , y en el Censo de Alucinaciones [Census of Hallucinations] – Esto apareció en un informe de Procedimientos de la Sociedad [Proceedings of the Society] en 1894.

          Hay varias teorías para explicar la acción de la telepatía. La primera es  compararla con la telegrafía sin hilos. En esta hipótesis  supone que es debido a la acción etérea de una onda: El pensamiento causa el movimiento de las células del cerebro del emisor, las células después producen el movimiento al éter cercano en forma de ondas que afectan a las células del receptor y dan lugar a un pensamiento correspondiente a pensamiento que comenzó el movimiento etéreo con una onda.
Esta teoría ofrece grandes dificultades. Un opositor a ella precisa que “un mensaje sin hilos es transmitido por una sucesión de impulsos etéreos de la onda  producida por las chispas eléctricas de la estación (células) y recibidas por el receptor coherentemente, mientras que para transmitir un diagrama o dibujo requerirá un número de ondas cerebrales producidas simultáneamente y ordenadas para formar el diagrama o el dibujo”.

          Otra manera de avanzar en la materia se ha propuesto recientemente  que el emisor no transmite su pensamiento, pero el receptor lee por clarividencia los pensamientos del emisor.
Hay también la teoría espiritualista. Se afirma que una entidad externa o etérea transporta las imágenes o los pensamientos desde una mente a otra.

          Otra teoría es que la telepatía ocurre en la mente subconsciente , sucede que la comunicación con la mente subconsciente del receptor se hace por medio de una mente universal subyacente a la cual está unida también la mente subconsciente del emisor y de la cual forman parte mediante mentes subconscientes individuales.

           Más de una teoría se ha aceptado según lo visto por la Sociedad para la Investigación Psíquica. En casos de telepatía espontánea, ahora se cree generalmente que el momento de la muerte o de crisis de una persona no es causado por un fantasma corporal objetivo, ya que se presenta una manifestación de telepatía, de manera que el emisor forma una imagen en la mente del receptor.

           En el caso de dos personas que ven una aparición a la misma vez, puede ser debida a que los dos receptores recibe cada uno, por separado , la impresión telepática o puede haber solamente un receptor que impresione la imagen telepática de la alucinación de la segunda mente que actúa como emisora.
         Ahora procederé a relatar algunos casos de telepatía que me han enviado para que personalmente los estudie. Mi primer experimento en la trasmisión de imágenes, dibujos y diagramas; ocurrió en las habitaciones de la Sociedad para la Investigación Psíquica en mayo de 1902. Una señora , Srta. M. Telbin, actuaba de receptora, y también como emisor. Estaban por entonces el Sr. J. G. Piddington , secretario honorario de la Sociedad y el Sr. Thomas, el secretario de entonces.

         Durante el primer experimento con la Srta. Telbin (la cual conocía), me senté con ella, detrás de una pantalla grande y opaca. Delante de ella había una pequeña mesa sobre la cual había una bola de cristal. Le pidieron que mirara al cristal y describiera cualquier visión que pudiera aparecer formada allí. Para comprobar posteriormente si  la visión se podía haber formado en el cristal al mirar, producida por influencias exteriores. La visión que aparece en el cristal no es objetiva, solamente aparece en la mente de los adivinos. En el otro lado de la pantalla, ocultos totalmente a la Srta. Telbin, estábamos sentados el Sr. Piddington y yo. Este  caballero procedió a tomar de una caja , que estaba detrás  de la pantalla, en el suelo y entre nuestras sillas, había varios artículos, y me los dio en silencio. Entonces concentré mis pensamientos sucesivamente en cada artículo. La Srta. Telbin dijo lo que había visto en el cristal, mientras el Sr. Thomas, se sentó en una posición que no lo veíamos, tomó notas de lo ocurrido.
        El primer artículo que me dio fue la Revista Windsor [Windsor Magazine], en la cubierta tenía grabado el Castillo  Windsor. Concentré mis pensamientos en este grabado, y la Srta. Telbin dio después una descripción de la visión que se presentó en su mente.
        Ella observó que podía ver árboles en el lado izquierdo del cuadro, cabañas también a la izquierda, y que había agua.
        Estos detalles eran correctos,  pero los detalles posteriores eran incorrectos,  el experimento fue abandonado por el fallo. Entonces escondí la la Revista en la caja, para que la Srta. Telbin no la viera y no tuviera ninguna oportunidad de saber cual es el dibujo, así poder repetirlo después en otros experimentos.

         En otros experimentos que se intentaron, la Srta. Telbin dijo espontáneamente que había tenido una visión del Castillo de Windsor.

         Este experimento se puede mirar como un caso de telepatía en diferido (retardado).

         Otro experimento con la misma señorita, habría tenido una doble telepatía simultánea, esto sería más importante y tendría más valor.

         La Srta. Telbin se sentó otra vez en la pantalla; en vez del cristal se le  colocó delante un pedazo de papel y un lápiz en la mesa.

         El Sr. Thomas y yo al mismo tiempo estábamos detrás de la pantalla ocultos de ella. El Sr. J. G. Piddington tomó notas. El Sr. Thomas y yo actuábamos como emisores simultáneos. Cada uno sostuvimos un pedazo pequeño de cartulina con un diagrama, pero cada emisor solo veía el suyo. Estos diagramas pertenecían a la Sociedad,  no los habíamos visto antes, ni el Sr. Thomas ni yo. Estaban en una caja entre nuestros pies detrás de la pantalla. Cada uno tomamos un diagrama de la caja, teniendo cuidado de que solo lo viéramos nosotros individualmente.
         Concentramos nuestras mentes en nuestros respectivos diagramas, y la Srta. Telbin dibujó sus impresiones en el pedazo de papel que tenía delante. Los dibujos fueron los siguientes:
Diagrama del Sr. Baggally
Diagrama de la Srta. Telbin
Diagrama del Sr. Thomas

Diagrama de la Srta. Telbin

         Cuando la Srta. Telbin consiguió la impresión del diagrama en tres intentos, eligiendo cual se parecía más.
         La correspondencia entre los dibujos y los diagramas es muy grande, y difícil de explicar por coincidencia.

         Hay que considerar los siguientes puntos. Primero, la Srta. Telbin hizo solamente dos dibujos y no había muchos diagramas que tuvieran tanta semejanza como los seleccionados. En segundo lugar, el diagrama del Sr. Thomas fue reproducido correctamente aunque una posición invertida (la inversión de la figura sucede a veces en experimentos de telepatía). En tercer lugar, el diagrama de tres triángulos, aunque no fue reproducido en la forma de triángulos, fue dibujado correctamente en lo que concierne a las tres secciones, y la posición relativa de las secciones también estuvo bien dibujada. En cuarto lugar, la Srta. Telbin no había visto antes los diagramas, con lo cual la probabilidad de dibujar un diagrama cualquiera es muy grande. Por último, la probabilidad de acertar los dos diagramas simultáneos es aún menor si hubiera sido por suerte.
         La explicación del resultado pudo haber sido  trucado por las personas que experimentaban, pero aún menos por mi parte, ya que yo era uno de los experimentadores.

         No era posible que un receptor viera a través de la gran pantalla lo que había en el otro lado, y no había espejos en la habitación donde se reflejaran los pequeños diagramas. No se habló ninguna palabra que diera la más leve pista. Estos dos experimentos telepáticos acertados se produjeron a distancia entre esta señorita y yo.

         Será de interés exponer aquí un experimento telepático, similar al que acabo de describir, entre dos emisores y un receptor que sir Oliver Lodge realizó en el año 1884.
         Cuando el experimento fue realizado por la Srta. Telbin, Sr. Thomas y por mi, no  sabíamos que sir Oliver Lodge había intentado ya un experimento de esta naturaleza.

Informe de Sir Oliver Lodge
“Mi primera experiencia de transferencia de pensamiento o telepatía experimental, fue obtenida en los años 1883 y 1884 en Liverpool, cuando Sr. Malcolm Guthrie que vive en esta ciudad me invitó a realizar una investigación que él llevaba con ayuda de una o dos personas que habían resultado ser sensibles, que trabajaban de empleados en una gran empresa George Henry Lee & Co
“Una gran cantidad de estos experimentos habían sido hechos antes de que me avisaran para continuar, en el otoño de 1883, pero es mejor que me ajuste a mi propia experiencia y exponga solamente aquellos en los cuales tenía control."

         “La mayoría de estos experimentos fueron confirmaciones de cosas que otros experimentadores habían observado antes. Pero un experimento que intenté era crucial, a mi me parece importante, el cual demostró claramente  que cuando están actuando dos emisores, cada uno contribuye al efecto, y que el resultado es debido , no solo a uno, sino a ambos combinados. El experimento es descrito así por mi en las columnas de Nature, Volumen XXX, página 145, del 12 de junio de 1834:

Un experimento de trasferencia de pensamiento”

        “Los lectores que estén interesados en el tema de transferencia del pensamiento, ahora está siendo investigado, y pueden estar contentos de oír hablar de un pequeño experimento que intenté aquí recientemente. La serie de experimentos fue originada y continuada en esta ciudad, la del Sr. Malcolm Guthrie el cual participó, también el Dr. Herdman, y uno o dos otros testigos más o menos científicos, estuvieron presentes en varias ocasiones, para examinar críticamente las condiciones e imponer las medidas que creían correctas. No necesitamos entrar en detalles, sino que apenas diré que con las condiciones que impusimos aparece la evidente transferencia de pensamiento, ocurre desde una o más personas, que concentrados piensan, y transmiten a otra en la misma habitación con los ojos vendados y aislado de los demás, a mi me pareció satisfactorio; por ejemplo, se imposibilitaba la posibilidad de engaño consciente a través de señales de una mano o por la contracción muscular involuntaria de la misma.

          Una semana más tarde, después de que dos emisores, habían acertado varias veces en la transmisión de la idea de un objeto o dibujo a otra persona lo percibía en la mente (receptor) teniendo los ojos vendados. Traje a la habitación una hoja opaca doble de papel grueso cuadrado, en una cara había dibujada una cruz y del otro un cuadrado, y en silencio se puso entre los dos emisores, de modo que cada uno miraba una cara sin saber que es lo que había en la otra parte del papel. El receptor no sabía de ninguna manera el procedimiento que se hizo, y  como de costumbre, no había contacto de ninguna clase – un espacio claro de varios metros había entre cada una de las tres personas. Pensé que podría haber una variación y que un emisor podría ser más influyente que el otro, o suponiendo que son iguales, si las ideas de las dos mentes emisoras podían fundirse en una cuando llegara al receptor.

           “En un tiempo muy corto el receptor hizo las siguientes observaciones (el silencio no se mantuvo): “Me parece ver cosas moverse alrededor” ”primero veo una cosa por arriba y otra hacia abajo, no puedo distinguirlo “.El dibujo fue entonces ocultado y al receptor se le quitó las vendas para que pudiera dibujar en una hoja de papel lo que había visto mentalmente. Ella dibujó un cuadrado y entonces dijo “aquí había otra cosa” y dibujó una cruz dentro del cuadrado, de esquina a esquina, dijo luego “no se si he hecho bien poniéndola dentro”

Original
                  Reproducción

“El experimento como evidencia es el más concluyente que los 110 realizados por el Sr. Guthrie, pero a mi me parece el más interesante, algo que producen dos mentes, y debería ser diferente en la mente del receptor, aparece absolutamente diferente a la imagen de las dos iniciales, pero cuando utilizábamos dos emisores con un solo objeto, se producía una sola imagen en el receptor. 
Una vez, por ejemplo (el caso se produjo bajo las mismas condiciones), cuando el objeto era un dibujo geométrico con las líneas principales unidas, la figura hecha por el receptor era reproducida en su totalidad, sin duda, excepto por el hecho de expresar una duda, si la línea horizontal media estaba o no estaba, aunque al final no la puso.

              Original

Reproducción


Como he dicho, los dos experimentos telepáticos acertados descritos, que ocurrieron en las habitaciones de la Sociedad para la Investigación Psíquica, también se hicieron otros experimentos a distancia entre la Srta. Telbin y yo
Nos pusimos de acuerdo, en sentarnos ciertos días de la semana y en un horario fijo. Yo debía actuar como emisor y transmitir mis pensamientos, ella, que está en ese momento en su residencia en Hampstead al Oeste, en Kensington. La distancia entre estos lugares  es más o menos de cuatro millas. El resultado de nuestra primera sentada, ocurrió el 20 de mayo de 1902, y pasó lo siguiente:


En 7 P.M.
Dibujé el diagrama siguiente:


En 7 P.M.
Dibujos de Srta. Telbin:



En 7.10 P.M.
Fijé mi atención en una flor:


En 7.10 P.M.
La Srta. Telbin obtuvo varios garrapatos incorrectos, pero entre ellos uno debajo de el cual ella había escrito las palabras "primera impresión"


En 7.20 P.M.
Miré unos prismáticos de ópera, en los cuales miré primero longitudinalmente:


entonces de lado:


En 7.20 P.M.
Los dibujos de Srta. Telbin eran:
Primera impresión:
Una serie de crestas:
Y este dibujo:
También cuatro dibujos:




No había posibilidad de que el emisor y el receptor hubieran copiado los dibujos, porque la carta se enviaba (de uno al otro) esa misma tarde y se recibía por la mañana del día siguiente por correo postal.
La telepatía fue realizada correctamente en este experimento.

      Continuamos intentando los experimentos algunos meses más, pero no conseguimos buenos resultados como al principio. En una ocasión, sin embargo, obtuvimos un resultado indirecto acertado. No me sentía bien, y no fijé mi atención en ningún objeto. La Srta. Telbin a día siguiente en la carta puso” No pude conseguir nada de su transmisión ayer por la noche”.Es por lo menos curioso que ella no hubiera recibido la impresión en la única noche que no había decidido experimentar.

        En otra ocasión, cuando la Srta. Telbin estaba en Londres (Folkestone) intenté transmitirle la impresión de un diagrama a las  8 P.M. esa tarde había una obra de teatro, en la cual mi esposa deseaba ir, por lo tanto decidí telegrafiar a la Srta. Telbin para decirle que no podía intentar el experimento por la noche, pero después de mucho vacilar, cambié de pensamiento y decidí hacer un esfuerzo y transmitir la impresión del diagrama cuando estuviera en el teatro. La carta de la Srta. Telbin que recibí al día siguiente estaba este efecto:
        “Conseguí mucha escritura ayer por la noche, pero era ilegible, entre las palabras que vi, leí como: “salir” y “lluvia”...”

          Esto podría ser una mera coincidencia, pero lo extraño de las palabras “que obtuvo” debían representar correctamente la idea que estaba en mi mente durante la mayor parte del anterior día. Me había preocupado mucho y vacilé si debía telegrafiar o no.
         El resultado parece indicar la transmisión de mi estado mental. La palabra “lluvia” representó correctamente el estado del tiempo en Folkestone, pero, como llueve a menudo en Inglaterra, esta no tiene ningún valor fundado.