Fenómenos Luminosos del
Médium Erto
- Gustave Geley –
Las publicaciones de los doctores Macrensie y Sanguineti
(Revue métapsychique) han llamado la atención de los metapsiquistas sobre los
fenómenos luminosos, verdaderamente extraordinarios, obtenidos con el médium
Erto.
El Instituto Metapsíquico Internacional ha conseguido,
después de las publicaciones referidas, que viniera a París dicho médium para
una serie de sesiones. Debía estar con nosotros durante tres meses y darnos
veinticinco sesiones. Solamente permaneció un mes y dio ocho sesiones. No
hemos, por lo tanto tenido tiempo para hacer un estudio profundo de sus
facultades, y nos hemos tenido que contentar con algunas observaciones.
Hablaré ahora únicamente del principal fenómeno que produce
Erto, que es la producción de luces de un carácter muy especial.
Los fenómenos luminosos obtenidos con Erto difieren
notablemente de la mayor parte de los obtenidos con otros médiums, tales como
Kluski, Guzik Willi Sch. (para no hablar sino de los médiums contemporáneos).
En todos estos casos, las luminosidades parecen siempre
asociadas a materializaciones de órganos o constituir una de las fases del
proceso de ectoplasmia. Las luces marcan, en su producción como en sus
evoluciones, una idea directriz, siempre relacionada con la de la
materialización.
Con Erto nada parecido ocurre: trátese de un fenómeno
puramente físico, una especie de descarga luminosa.
Parece, pues, ser una excepción. Debe notarse, sin embargo,
que otro médium muy conocido, la Sra. Silbert, produce tan pronto
materializaciones como descargas luminosas análogas a las de Erto.
A caso cualquier día producirá este último también
manifestaciones ectoplasmáticas típicas.
Describiré en primer lugar el fenómeno tal como se ha
verificado ante mí en las sesiones de París.
Después hablaré del procedimiento de vigilancia y
comprobación que hemos empleado.
Pueden obtenerse con Erto
varias categorías de manifestaciones luminosas.
1º Simples relámpagos.-
son enteramente comparables, teniendo en cuenta la proporción, a lo que
vulgarmente se llama “relámpagos de calor”.
Son relámpagos que salen generalmente de la parte inferior
iluminan el suelo y a veces las paredes de la sala. Su duración es muy corta
(una fracción de segundo).
2º Rayos luminosos
.- Son rayos de luz blanca, muy largos pueden llegar hasta ocho metros de
largo. Son visibles a veces en todo su trayecto. Lo más frecuente es que,
apenas apreciable en su curso, iluminan bruscamente los muros o el techo de la
sala.
Parecen dirigidos a voluntad por el médium.
3º Bolas luminosas.-
Son esferas que varían desde el tamaño de una nuez hasta el de una naranja. Su color
es blanco, rojizo o azulado. Siempre aparecen a corta distancia del médium.
4º Relámpagos en
zig-zag.- Salen de los brazos o de la cabeza. Son verdaderamente
deslumbradores. Tienen la claridad de las lámparas de medio vatio. La duración
es muy corta.
5º Relámpagos de igual naturaleza, pero sin
puno de partida aparente.- Estos
relámpagos parecen producirse a 0,50 metros del médium, aproximadamente. Son como
la periferia resplandeciente de un cono obscuro cuyo vértice fuera el médium.
6º Por último,
fenómenos luminosos en forma de cohete.- Son como puntos muy brillantes
proyectados por el médium y extinguiéndose al caer.
Los diversos fenómenos referidos presentan tres
características notables:
1º Su intensidad
luminosa- Toda la sala, o por lo menos el lado donde está el médium se
ilumina. Se ve netamente la silueta obscura del médium.
2º Su carácter
polimorfo.- Las diversas categorías alternan o se suceden sin orden alguno.
3º Son luces frías.
No van acompañadas de combustión. No desprenden calor alguno. Son casi
inactivas. El aparato fotográfico no se impresiona mas que proyectando
directamente la descarga luminosa contra el objetivo.
La vigilancia e inspección del médium es de naturaleza
enteramente satisfactoria; antes de cada sesión Erto se desnuda completamente. Se
examinan sus cavidades: boca, orejas, recto, hasta la uretra.
Se le puede encerrar en una jaula metálica minuciosamente
explorada de antemano. No tiene medio alguno de fabricar artificialmente la
luz.
Por otra parte, el carácter polimorfo de las manifestaciones
hace inverosímil el uso de un truco cualquiera. Parece imposible, dado el
estado actual de nuestros conocimientos físicos, reproducir por medio de fraude
el conjunto de los fenómenos obtenidos.
Sólo tengo que hacer una reserva: Exige Erto la obscuridad
absoluta y está acostumbrado a que no le sujeten las manos. Vanamente he
pretendido obtener fenómenos a la luz roja o teniéndole cogidas las manos. He fracasado.
Mas tengo que decir que la Sra. Silbert ha producido en mi presencia
manifestaciones muy parecidas a las de Erto en una sesión hecha a la luz de la
luna (luna llena). Yo tenía cogida una de sus manos y la otra quedó
constantemente visible sobre la mesa. Entretanto ella no hizo ningún
movimiento.
P.S.- Las reservas que he formulado en las líneas anteriores
estaban justificadas, desgraciadamente. Acabo de saber que:
1º Los llamados fenómenos de Erto pueden en su mayor parte
ser imitado por medio de ferro-cerio.
2º Que verosímilmente, y a pesar de sus protestas, el médium
ha utilizado ese truco.
Las pruebas continúan.
Ectoplasmia y clarividencia