Cuatro fotografías de "Katie King"
El Sr. Frederick William Hayes, entre cuyos papeles se
encontraron estas fotografías por su hijo, el Sr. Gerald Hayes, quien muy
amablemente las presentó al Colegio, fue un artista distinguido (1848-1918)
cuyas obras se exhibieron en una Exposición Conmemorativa en 1922.
Fue un amante de la naturaleza y la estudió de principio a
fin con un intenso poder de observación cercana. Su alcance no era amplio, pero
la intensidad de su visión más que expía su circunscripción; y es refrescante
en una época que está demasiado dada a los detalles escabrosos con el pretexto
de lograr amplitud, ver su hermosa interpretación de la minuciosa naturaleza.
Quizás el mayor encanto de su obra sea su frescura. Está en
su mejor momento en esas pequeñas transcripciones donde los tonos de la tierra,
el mar y el cielo se dan con una viveza peculiar. Estos los pintó con el método
de "aceite fino" que hizo peculiarmente suyo. Sus elementos
esenciales fueron el uso generoso de trementina con óleo. Se estiró y
dimensionó un trozo de papel de cartucho. Las masas principales se lavaron
luego con el color fino, agregando detalles con pinceles más pequeños. Se han
obtenido ejemplos de su pintura para el Museo Británico, el Museo Victoria and
Albert, la Galería de Arte Walker Liverpool, Manchester, Birmingham,
Wolverhampton, Leeds, Sheffield, Hull, Nottingham, Bristol, Southport, Burnley
y Glasgow Art Galleries y el Galería Municipal de Arte Moderno de Dublín.
Se incorporó a la S.P.R. antes de 1890 y permaneció como
miembro activo hasta su muerte. Estuvo asociado con las señoritas Cook y Sir
William Crookes en las sesiones con la señorita Florence Cook para las
manifestaciones de "Katie King" y sus puntos de vista sobre los
fenómenos se indican en una novela A Kent
Squire. En el capítulo xxxiv de ese libro se presenta el caso real del
resurgimiento de un bebé muerto. Su interés por los fenómenos psíquicos fue
siempre estrictamente científico; primero para establecer y definir la
ocurrencia con una perspectiva imparcial y teniendo en cuenta todos los
posibles factores normales: explicación del "cómo" o "por qué"
siendo tratados de forma bastante separada.
Psychic Research era muy diferente en esos primeros días de
lo que es ahora. Necesitaba una mente mucho más abierta que en la actualidad y
su interés y trabajo en ella merecen un lugar entre sus pioneros.
LAS CUATRO
FOTOGRAFÍAS
Éstas, publicadas ahora por primera vez, son copias de las
que él mismo tomó en la casa de Sir William Crookes. En la parte posterior del
número 4 está la inscripción autógrafa como se muestra a continuación:
Sra. Helen
Whittall Dr. Gully
Katie King.
Estuve
presente
Kate S. Cook.
No hay registro de la fecha en que se tomó.
Hablan por sí mismas y fueron encontradas guardadas entre sus
papeles.
COMENTARIO
"Sabes", dijo Justin, incómodo, "me siento
bastante mal por la forma en que me comporté al principio. Verás, no quería
creer lo que dijiste, y por eso no lo hice".
Brown asintió con simpatía.
"Solo unas noventa y nueve de cada cien personas son
así", murmuró.
John Stephen Strange.
Esta frase, sacada de una novela moderna (The Strangler
Fig, p. 212 ), expresa acertadamente la reacción de las mentes corrientes,
incluidas algunas que se hacen pasar por distinguidas, ante cualquier nueva
verdad. Ha sido ejemplificado a lo largo de la historia. A veces va más allá.
Sir Oliver Lodge en su My Philosophy
relata (p. 269) cómo un experimento muy simple, pero (aparte de la fuerza
psíquica) inexplicable, fue presentado al eminente Secretario de la Royal
Society, Sir George Gabriel Stokes, quien sostuvo que era mecánicamente
imposible y se negó a presenciarlo. "En otras palabras, el testimonio de
un experimentador bueno y famoso sobre un resultado simple pero increíble,
totalmente controlado por él mismo, no fue aceptado". (pág.270).
Es cierto que William Crookes abandonó el intento de
convencer a sus hermanos científicos, pero nunca retiró ni modificó las
conclusiones que publicó en las Investigaciones
sobre los fenómenos del espiritualismo en 1874. Ante la Asociación
Británica de Bristol en 1898, declaró:
“Sobre otro interés que aún no he tocado, para mí el más
importante y el más lejano de todos. Ningún incidente de mi carrera científica
es más conocido que el papel que desempeñé hace muchos años en determinadas
investigaciones psíquicas. Han pasado treinta años desde que publiqué un relato
de experimentos que tienden a mostrar que fuera de nuestro conocimiento
científico existe una Fuerza ejercida por la inteligencia que difiere de la
inteligencia ordinaria común a los mortales. No tengo nada que retractarme. Me
adhiero a mis declaraciones ya publicadas. De hecho, podría agregar mucho más".
Los experimentos del profesor Crookes con la señorita
Florence Cook como médium, duraron tres años. La Katie King que se manifestó
afirmó ser la hija de Sir Henry Owen Morgan, ex bucanero y gobernador de
Jamaica bajo Carlos II. Su nombre era Annie Owen Morgan. El nombre "John
King" asumido por su padre, nunca fue explicado satisfactoriamente: su
identidad como el gobernador Sir Henry Morgan nunca se ha establecido.
Crookes no estaba convencido de la identidad de Katie. En una
carta al profesor Brofferio en 1894, dijo: "Lo único que me preocupa es
que existan seres invisibles e inteligentes, que dicen que son los espíritus de
los muertos, pero la prueba de que realmente son los individuos que asumen ser,
la que necesito para creerlo, nunca la he recibido, aunque estoy dispuesto a
admitir que muchos de mis amigos afirman haber obtenido realmente las pruebas
deseadas, y yo mismo ya muchas veces he estado al borde de esta convicción .
" (Fur den Spiritismus. Leipsic. 1894.) Esto elimina la supuesta
credulidad del Sr. Crookes. Katie King ha sido recientemente asociada con el
círculo del Dr. Glen Hamilton y la fotografía de ella en Psychic Science de enero de 1933, Lámina 5, puede compararse con el
número 4 del presente número.
Siempre ha sido motivo de pesar que, con la excepción de dos
o tres placas fotográficas de los cuarenta y cuatro negativos tomados por Sir
William Crookes, OM, FRS, fueron destruidos después de su muerte por personas
que consideraron que todos los monumentos de su devoción a la investigación
psíquica dañaría su posición científica.
No es necesario aquí hacer más que aludir a la tormenta de
odio, difamación, falsedad y calumnia a la que éste hábil experimentador,
miembro de la Royal Society, medallista de oro y miembro de la Orden del Mérito
fue expuesto, simplemente porque testificó lo que había probado repetidamente.
Incluso en la actualidad, cuando los fenómenos se han impuesto por repetición
constante en un mundo reacio, el Dr. Nandor Fodor comenta en su artículo sobre
Crookes (Encycl. P. 71) que "Ya en 1930 encontramos al Sr. H.G. Wells en su
libro The Science of Life afirmando
que 'sus experimentos han sido sometidos a críticas minuciosas y ahora se ve
que no tienen ninguna pretensión de ser científicos de ninguna manera. El
propio Crookes abandonó el intento de convencer a sus hermanos científicos y
volvió a su trabajo químico. Wells también dijo que "Sir William Crookes
tuvo que someterse a las condiciones exigidas por los médiums".
La mejor refutación es la declaración de Crookes ante la
Asociación Británica para el Avance de la Ciencia en 1876. . . . Dijo: "Me
pidieron que investigara cuando el Dr. Slade vino por primera vez, y mencioné
mis condiciones. Nunca he investigado excepto en estas condiciones. Debe ser en
mi propia casa, con mi propia selección de amigos y espectadores, bajo mis
condiciones de vida, y puedo hacer lo que quiera para que el aparato físico
pruebe las cosas en sí mismas, y no he confiado más de lo que pueden mis
sentidos. Pero cuando es necesario confiar en mis sentidos, debo disentir por
completo del Sr. Barrett, cuando dice que un investigador físico entrenado no
es rival para un prestidigitador profesional. Yo sostengo que una investigación
psíquica es más que un concurso".
El señor Bozzano en su libro Animismo y Espiritismo da, en la p. 120. et seq., Resumen de este
caso. Él dice :
"Cabe recordar que 'Katie King', dotada en alto grado de
todos los atributos que caracterizan a una entidad pensante, no deja de
mantener su existencia espiritual independiente, dice el nombre que llevó
cuando vivía y narra las dolorosas vicisitudes de su corta vida terrenal.
También muestra su existencia independiente mostrándose al experimentador al
mismo tiempo que su médium, dejándose fotografiar junto con la médium y el Sr.
Crookes; permitiendo que él y la Sra. Marryat la toquen, la besen , y sentir el
latido de su corazón y el ritmo de su pulso, y finalmente despertar a la médium
y conversar con ella ".
Este último episodio tiene un gran valor psicológico; Por lo
tanto, citaré un breve pasaje que describe la despedida de Katie King. Crookes
escribe:
"Después de cerrar la cortina, conversó conmigo durante
un tiempo y luego cruzó la habitación hasta donde la señorita Cook yacía
inconsciente en el suelo. Inclinándose sobre ella, Katie la tocó y dijo: '¡Despierta,
Florrie, despierta! Debo dejarte ahora.' La señorita Cook se despertó y, entre
lágrimas, le suplicó a Katie que se quedara un poco más. "Querida, no
puedo; mi trabajo está terminado. Dios te bendiga", respondió Katie, y
luego continuó hablando con la señorita Cook. Durante varios minutos las dos
conversaban, hasta que por fin las lágrimas de la señorita Cook le impidieron
hablar. Siguiendo las instrucciones de Katie, me adelanté para apoyar a la
señorita Cook, que estaba cayendo al suelo, sollozando histéricamente. Miré a
mi alrededor, pero Katie de túnica blanca había desaparecido."
Este pasaje, citado de Animismo
y Espiritismo, pág. 121, se da para refutar la teoría corriente entre
quienes recurrirán a las nociones más extravagantes para no admitir la
supervivencia. El pasaje particular al que se hace referencia de las obras de
M. Sudre es el siguiente:
Por tanto, es lógico concluir que todos los fenómenos de
materialización proceden de esta causa (ideoplastia combinada con prosopo-pesis
metagnómica), desde objetos inanimados y vestidos de fantasmas, hasta las
imágenes más completas, el último puede presentarse con personas que han
vivido, proviene de la memoria del médium o de la de los asistentes ". (p.
299 Introduction à la Metapsychique
Humaine.)
La renuencia a aceptar conclusiones indeseables llevará a
extremos tan absurdos a un hombre que "no desea creer".
Las pruebas más concluyentes de la supervivencia las
encontraré en este libro de Bozzano, que aconsejaría a todos que las leyeran.
Entre estas pruebas, una de las mejores es el excelente resumen de los
experimentos de la Sra. Willett y la Sra. Verrall, que duró dieciocho meses
antes de que se aclarara su propósito. El análisis y los detalles se
encontrarán en el Vol. xxxix de los Proceedings
de la SPR relacionados por Lord Balfour. Llegará a las mismas conclusiones que
Lord Balfour. Bien podemos preguntarnos qué más se puede exigir a las
personalidades difuntas como prueba de su existencia espiritual independiente
del médium. Desde el comienzo mismo de la investigación metapsíquica hasta el
día de hoy, personalidades difuntas han proporcionado todas las pruebas que la
mente humana puede imaginar o exigir. Inventan un sistema nuevo e inesperado de
la mayor eficacia, no sugerido a ellos, sino inventado ellos mismos, quienes,
habiendo estado durante su vida interesados en la investigación metapsíquica,
y conociendo bien las hipótesis gratuitas y a menudo contradictorias inventadas
por los escépticos, se esfuerzan por superarlas inventando nuevas e ingeniosas
pruebas, de las cuales este ejemplo es solo uno entre mil.
Una y otra vez encontramos repetidas las viejas objeciones
como si nunca se hubieran respondido: que los "espíritus" no dan nada
nuevo sobre Física y Química; que solo hablan de trivialidades; que son
inútiles, etc. El simple propósito de estas manifestaciones es revelar la
Continuidad de la Vida mediante evidencia a nuestros sentidos materiales. ¿Por
qué deberían ellos, que han pasado más allá de toda la materia tal como la
conocemos, preocuparse por nuestras especulaciones cambiantes? ¿Serían creídos
si lo hicieran?
Hacen creíbles las apariciones de Jesús en esta época
materialista. Muestran que las facultades ampliadas del alma en el estado
posterior a la muerte permiten al desencarnado ver de un vistazo el carácter de
todos los que encuentran; y muestran que el alma encarnada, incluso en el
cuerpo de carne, tiene vislumbres de su destino superior. Abolieron el miedo a
la muerte. ¿Es esto trivial, o inútil? Si los escépticos leyeran con la mente
abierta y consideraran la evidencia de manera imparcial, la respuesta sería
clara.
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