- Everard Feilding: Sesiones con Christopher Chambers




Sesiones con Christopher Chambers



- Everard Feilding –


Nota por E. J. DINGWALL: El Sr. Feilding había sido llamado para las actividades del Sr. Christopher Chambers, tras los elogios de sus actividades y que se describían en la prensa británica Espiritualista en 1905. Fue descubierto realizando los mismos trucos pueriles que aquí se describen, al menos seis veces más, y en 1919 al realizar su actuación bajo los auspicios de  la Walthamstow Spiritualist Church de Londres prometió no ofender otra vez. El artículo del Sr. Theobald menciona el relato titulado “Mediumnidad física y Fraude”, y apareció en Light, en diciembre de 1905, pp. 614-615.





El informe apareció en Light en la primera parte de 1905, de una “materialización” del médium Sr. Christopher Chambers, que había estado dando sesiones en Huddersfield y en otras ciudades del norte. Más avanzado el año, sus actuaciones se hicieron famosas a través de los informes de la prensa en varios documentos de Newcastle, entre estos informes un desenmascaramiento tuvo lugar el 14 de octubre de 1905, según se informó en el Newcastle Daily Chronicle del 17 de octubre. De acuerdo con la declaración del Sr. Arthur T. Neale de Newcastle, quien interpretó el papel principal de esta exposición, el Sr. Neale, le había levantado sospechas una sesión anterior, obtuvo durante el  descanso dos lámparas eléctricas, que podían encenderse en cualquier momento y cuando una de estas formas salió, la luz se dirigió hacia ella, y reveló que era el Sr. Chambers vestido con una sábana, con un bigote falso y un turbante de papel con forma oriental. Él se lanzó hacia atrás de la cortina del gabinete, y encontró en la silla los pantalones, los calcetines y las botas del médium. El Sr. Easthope, quien había preparado la sesión devolvió el dinero a los asistentes y escribió en el Newcastle Daily Chronicle que el Sr. Chambers había sido “sorprendido infraganti en mi reunión del sábado 14 de octubre, por uno de los asistentes, el médium que se encontraba vestido con ropa de espíritu, para el horror y la repugnancia de los asistentes presentes.”



Después de esto, algunos espiritualistas en Newcastle organizaron una serie de sesiones de prueba con el Sr. Chambers, con la esperanza de tener alguna evidencia de fenómenos reales. El informe, sin embargo, fue que los procedimientos eran bastante concluyentes, ya que, el médium había sido adecuadamente sujetado en el interior del gabinete, y las formas surgieron del mismo. El Sr. W. H. Robinson, quien había organizados estas sesiones, confirmó en una carta su insatisfacción, y añadió que  “lo encontré [a Chambers] sin valor como médium e informó debidamente a la prensa espiritual, pero ningún aviso fue dado.”


En este período se hizo circular una fotografía que representaba al Sr. Chambers con una supuesta “forma espiritual” detrás de él, esta forma representaba su supuesto control, “Lottie”. No sólo un examen de la fotografía muestra rasgos obviamente sospechosos, además el fotógrafo, el Sr. James Wallace de Newcastle, envió después una carta al Newcastle Daily Chronicle del 30 de noviembre de 1905, a través de sus abogados, confesando que había preparado la placa consiguiendo y había conseguido a una joven dama que se hiciera pasar por un fantasma, y había utilizado la misma placa después para tomar la fotografía del Sr. Chambers. Esto ha sido confirmado a nosotros en una carta de la Sra. Wallace, quien afirma que todo el asunto había sido una invención de su marido, sólo como una broma a expensar del Sr. Chambers.


El Sr. Chambers deseaba ansiosamente después de esto, volver a establecer su reputación, dispuesto a través de un caballero del norte de Inglaterra, que era conocido por nosotros y nos había dado previamente un informe favorable a él, para dar algunas sesiones a la Sociedad para la Investigación Psíquica, a condición de que él no recibiera ninguna paga, ni por las sesiones ni para sus gastos, a menos que, a juicio de los funcionarios de la Sociedad se les ofreciera una prueba concluyente de la agencia sobrenatural:  las formas materializadas también deben aparecer, daría su consentimiento para ser examinado su cuerpo por los asistentes, a fin de verificar que tanto él como la aparición ante los asistentes eran entidades separadas, pero ni la aparición ni el médium deben ser agarrados de repente mientras los fenómenos sucedan.


El acuerdo quedó firmado antes de venir, el Sr. Chambers viajó a Londres, y cuatro sesiones se llevaron a cabo en las salas de la Sociedad para la Investigación Psíquica en diciembre, los días 12, 13, 15 y 16, estando dispuestas por el Sr. Feilding, Sr. Baggally, el Coronel Taylor y la Srta. Johnson, que estaba generalmente presente y otros asistentes que habían sido invitados, y además miembros de la Sociedad, el Sr. Chambers trajo un amigo con él en tres ocasiones, pero no fue autorizado a hacerlo.


En la primera sesión el médium entró en el gabinete, y pretendía estar en trance, habló con voz ligeramente diferente a la suya normal, pero no sugirió ninguna alteración diferente a la que podría haber producido por su voluntad. Dos o tres formas aparecieron, un hombre con barba negra corta (el mismo Sr. Chambers vestido y con un bigote), que salió del gabinete y se inclinó varias veces extendiendo su brazo izquierdo en toda su longitud. El Sr. Babally, que estaba sentado al lado del gabinete, pude ver que sólo la parte frontal de la forma estaba cubierta, mientras que la parte posterior se vería el chaleco del médium, que al parecer llevaba después de quitarse la chaqueta. Más tarde, una pequeña forma, que se suponía ser un niño, se vio en la apertura dentro, entre las cortinas, parecía ser una forma vagamente blanca sin brazos ni cabeza. La luz de la habitación fue encendida por una lámpara eléctrica, envuelta en papel rojo, para dar un poco de luz. No había ningún rastro de los fenómenos que sugirieran la suplantación deliberada de las “formas” de espíritus por el médium.


La segunda sesión del 13 de diciembre fue prácticamente una repetición de la primera, las “formas”, fueron, en todo caso, bastante diferentes, debió a que el médium insistió en que hubiera todavía menos luz. Contrariamente a lo estipulado en el contrato, no se le dio la oportunidad de examinar al médium durante las apariciones de las “formas espirituales”.


En la tercera sesión , el 15 de diciembre, el Sr. Chambers fue acompañado por el Sr. John Lobb, un señor bien conocido por su interés en los fenómenos psíquicos. En esta ocasión, por sugerencia del propio médium, estuvo atado al sillón de mimbre con algunos objetos dispuestos en el suelo, cerca de él, y dijo que estando en el sillón, tal vez podría levitar sobre las cabezas de los asistentes. La sujeción fue realizada por el Sr. Baggally y otro caballero, ambos expertos en la materia, y a petición del Sr. Chambers, la habitación estaba completamente a oscuras. Nada en absoluto podía ser percibido, excepto que durante la sesión el Sr. Chambers, tenía colocado un parche luminoso en su espalda (sin su consentimiento), de esta manera se podía determinar su paradero, observando poco a poco su trabajo cerca de los objetos dispuesto sobre el suelo. Posiblemente cuando llegó allí se encontró que debido a la seguridad con la que fue atado no podría hacer nada con ellos, y volvió a trabajar otra vez en la parte de atrás.


En la cuarta sesión, el 16 de diciembre, apareció de nuevo una “materialización”. La lámpara eléctrica, tapada con un papel rojo, se volvió a utilizar, y había un poco menos de luz que antes. Los asistentes fueron colocados en forma de herradura, frente al gabinete, el Sr. Feilding y el Sr. Baggally  sentaos respectivamente extremos de la herradura y cercanos al gabinete. Después de una conversación y un discurso del supuesto control “Lottie”, fue el médium al gabinete, y algún tiempo después algunas vagas formas blancas se observaron, aparecían como figuras blancas que se materializaban desde abajo, la pañería aumentaba gradualmente desde el suelo, entre la división de las cortinas, hasta que aparecía la forma completamente cubierta. Una y otra vez se le dijo al médium que el comité no tenía ninguna intención de violar su acuerdo de no aprovecharse de la “forma de espíritu”, la mera forma no podía ser considerada como probatoria a menos que se diera la oportunidad de comprobar que mientras que ella estaba fuera del gabinete el médium se encontraba dentro, el Sr. Chambers, tras el regreso de la forma al gabinete, retiró la cortina y enseñó que seguía sentado en su silla sin moverse para demostrar que era él mismo y a su derecha había una forma blanca. Es probable que calculara más la intensidad de la luz, ya que era perfectamente claro a los que estaban sentados cerca del gabinete que la forma no era más que un pedazo de paño blanco en la mano derecha y movida por la mano, muy lejos de ser algo realista.


Más tarde, se hizo un nuevo intento de simular hacia arriba una materialización de una forma espiritual de manera progresiva, lentamente levantando un pedazo de gasa de muselina blanca entre la división de las cortinas, y formada en conjunto, la acción de volver fue obvia para los que estaban sentados cerca del gabinete. Luego la forma totalmente cubierta, en la boca había sujeta una tela (Chambers llevaba bigote), salió del gabinete. Al ser preguntado por los asistentes para que les diera la mano, le ofreció su mano izquierda a cada uno de ellos y no permitía que el lado derecho fuera visto o tocado, el Sr. Chambers había perdido tres dedos de la mano derecha. Cuando se le preguntó si era la esposa fallecida de uno de los asistentes, la forma se inclinó en asimiento.


A medida que avanzaba por la habitación, el Sr. Baggally y el Sr. Feilding vieron los pantalones negros del médium por la parte de atrás, sólo el ropaje cubría la parte frontal. Después de que esta forma se hubiera retirado, un hombre con barba negra fue visto, pero otra no se permitió otro examen razonable. Al final de la sesión, el Sr. Feilding y el Sr. Baggally informaron al médium de lo que habían visto, y que no tenían dudas. Sn duda las telas y la barba fueron ocultadas por él. Él negó absolutamente que esto fuera así o que hubiera tomado parte en la producción de los fenómenos. Luego se le pidió que fuera  a una habitación contigua, pero él se negó. El Sr. Lobb admitió la razonabilidad de la petición, e hizo todo lo posible por persuadir al médium o adherirse a él, diciendo que si era por motivos de modestia las objeciones del Sr. Chambers, sin embargo persistió en su negativa, y en ese momento se despidió.  Aunque él no hizo nada para confesar su fraude, prometió que no daría más sesiones, que buscaría en el futuro una vida diferente con un trabajo honesto. Se supo, sin embargo, que desde entonces había reanudado sus operaciones en el norte de Inglaterra, donde, sin duda, una banda de entusiastas fervientes creyentes, como es habitual, visto todas las pruebas, seguían apoyando sus sesiones.


 (Firmado)


W. W. Baggally
Alice Johnson
Everard Feilding (presente en tres sesiones)
Le M. Taylor (presente en dos sesiones)
John Lobb (presente en dos sesiones) 

Artículo de "Sittings with Eusapia Palladino and Other Studies" (New York: University Books, 1963), pero publicado originalmente en el  Journal of the Society for Psychical Research, vol. 12, 1905.