- Frederic W. H. Myers


Frederic W. H. Myers


1843-1901

Una mente principalmente para la investigación psíquica, fundador de una filosofía cósmica, que aún puede revolucionar el pensamiento científico, un profundo erudito, un distinguido poeta y un psicólogo brillante. Durante treinta años ocupó el puesto de inspector de escuelas en Cambridge. Aquí surgió su planteamiento de seguir las investigaciones psíquicas, en 1869 después de dar un paseo a la luz de las estrellas conversando con Henry Sidgwick.

Su punto de partida fue, que si un mundo espiritual alguna vez a de ser manifestado al hombre, es el momento de comprobarlo, y como consecuencia de una investigación seria debe determinarse por descubrimientos de signos inequívocos de ello. Aunque “si todas las tentativas de verificar científicamente la intervención de otro mundo definitivamente se muestran vanas, sería un golpe terrible, un golpe mortal, a todas nuestras esperanzas de otra vida, así como de la religión tradicional “ya que” sería muy difícil de persuadir a los hombres de pensamiento claro de nuestros días, de que lo que ahora es engaño e ilusión en el pasado fue verdad y revelación”.

Él tenía en mente los mismos métodos de preguntas deliberadas, desapasionadas y exactas que aumentaba nuestros conocimientos reales del mundo visible. Estas ideas fueron sus acompañantes como fundador del S.P.R., en 1882. Dedicó todas sus energías a su trabajo y se concentró con profundo asimiento en la ciencia en el plano psicológico. En los dieciséis volúmenes de Proceedings publicados mientras vivió, está lleno de contribuciones importantes de su pluma. En Phantasms of the Living , el sistema de clasificación fue idea suya. La palabra de telepatía, supranormal y verídica junto con otras fueron acuñadas por él. Jugó un papel importante en la organización del Congreso Internacional de Psicología, y actuó como secretario continuo en Londres, en 1892. En el SPR ocupo el puesto de secretario honorario. En 1900 fue elegido para la silla presidencial, un puesto distinguido por los científicos que lo había ocupado antes. Contribuyó con muchos artículos a las revistas Fortnightly Review, y Nineteenth Century. Fueron recogidos y publicados en 1893 bajo el título de Science and a Future Life, and Other Essays.

Su gran obra, la Human Personality and its Survival of Bodily Death, fue publicada póstumamente. La Universidad de Madras lo adoptó como su libro de texto para sus cursos sobre conferencias sobre psicología en la facultad de filosofía y letras. Ésta es una exposición de los potenciales poderes del yo subliminal y que imaginaba como el yo verdadero, un organismo psíquico enorme del cual el conocimiento ordinario era tan solo una mínima fracción, la vida del alma no estaba atada a la vida del cuerpo, y las facultades supuestamente paranormales era canales ordinarios de percepción. Esto es una teoría de enormes implicaciones. Es un ataque a la posición espiritualista de que todos los fenómenos supranormales estuvieron previstos por los espíritus de los muertos. Myers afirmó que como mucho la proporción más grande prevista por la acción del espíritu es la producida como emisor sobre el receptor. La teoría ha traído el orden a una masa caótica de fenómenos psíquicos. Por otra parte, esto realzó enormemente la probabilidad de supervivencia. Como los poderes que reclamaba para el yo subliminal, no degeneraron durante el curso de la evolución, y no tienen ningún objetivo en nuestra vida, con lo cual serán destinatarios para una vida futura ¿por qué, por ejemplo, en el caso del yo subliminal preservar cuidadosamente todos los pensamientos y recuerdo si no los usa? William James sugirió que los problemas de la mente subliminal debería llamarse “El Problema de Myers”, cualquiera que sea la sentencia en el futuro puede estar basada en la “especulación” de Myers, quien dijo “el crédito seguirá siendo el primer intento para examinar los fenómenos de alucinaciones, automatismos, doble personalidad y la mediumnidad como partes unidad de un sujeto entero.

“Si descubrimientos futuros confirman su tesis, de la intervención del desencarnado, en la tela y tejido de nuestro mundo mental y físico” escribe Theodore Flournoy” entonces su nombre será inscrito en el libro de oro del iniciado, y unido a aquellos como Copérnico y Darwin, él completaría la triada de genios quien tienen un pensamiento científico más profundo evolucionista, en las ramas de la Cosmología, Biología y Psicología.”

El mismo autor, un psicólogo profundo, así es considerado Myers, “una de las personalidades más notables de nuestro tiempo en el reino de la ciencia mental”. El Doctor Dr. Leaf lo compara a Ruskin y le da un respeto a la par. Según Charles Richet “Si Myers no fuera un místico, él tendría toda la fe de un místico, y el fervor de un apóstol, en la conjunción de la sagacidad y la precisión de un sabio”.

“Yo nunca conocí a un hombre tan esperanzador acerca del último destino” escribe Oliver Lodge en el memorial. “Él, una vez me preguntó si yo cambiaría – si eso fuera posible- mi destino desconocido, podría ser todo de siglos de absoluta felicidad y sabiduría terrestre, hasta después de la desaparición del Sol, y después del final. ¿por qué no?".

Tal fue su convencimiento de la supervivencia que sus amigos, a menudo le oían decir, “cuento los días hasta las vacaciones”.

En la Human Personality , los fenómenos físicos reciben poca consideración. Myers cree que la presencia de fenómenos telecinéticos, a pesar de los experimentos de William Crookes y suyos, y su presencia genuina, desde el punto de vista público, no le parecía suficientemente creíbles para justificar su discusión en su libro. Sin embargo, en relación con la posesión, él sugirió una explicación ingeniosa, esto es, que el espíritu de posesión puede usar el organismo más hábilmente que su dueño y puede emitir alguna energía que invisiblemente puede mover objetos ponderables sin contacto con la carne. De sus propias investigaciones entre 1872-1876, dijo que ellos eran “pesados y bastante desagradables”.

El 9 de mayo de 1874, en la empresa de Edmund Gurney, donde conoció a Stainton Moses, llevando a una amistad. Cuando Moses murió el 5 de septiembre de 1892, sus cuadernos fueron dados a Myers para su estudio. Sus artículos en  Proceedings, SPR, Vol. IX y Vol. XI contienen los mejores relatos  de este notable médium físico, pero sus conclusiones no fueron basadas en las experiencias personales con Moses. Cuando él tuvo unos encuentros con Srta. Wood y Srta. Fairlamb, en 1878, mantuvo de manera extraña silencio. Alfred Russel Wallace puso en sus notas que realizó sesiones bajo los auspicios del SPR con las dos médiums en Cambridge, en sus habitaciones junto con Henry Sidgwick. Ellos declararon que las muñecas de las médiums fueron bien atadas con cintas y al final clavadas con tachuelas al suelo y selladas. Muchas formas salieron del gabinete, tanto adultos como niños. Los sellos fueron encontrados intactos. El color de la cinta y la cera del sellado fueron diferentes en cada sesión, la médium fue puesta en una red que fue enganchada a las poleas de una máquina pesada, sin embargo, los fenómenos ocurrieron como siempre, sin la menor sospecha.

En 1894 en Ile Roubaud el invitado fue Charles Richet, y participó con Oliver Lodge, junto a Julien Ochorowitz, en los fenómenos producidos con Eusapia Palladino. Él no podía abstenerse de expresar su opinión y admitió que los fenómenos eran verdaderos. La exposición de Cambridge sacudió su creencia y escribió:

“Yo tenía sin duda la creencia de que desde el principio se había producido  un engaño sistemático y que no había ninguna razón para atribuir cualquiera de estos fenómenos que se producían en las sesiones a causas supernormales.”

Más tarde, sin embargo, participó en otra sesión con Eusapia en París, en compañía de Richet, y se declaró convencido que tanto la telequinesia como los ectoplasmas eran fenómenos genuinos.

Tuvo sesiones con la Sra. Everitt, Mme. D’Esperance y David Duguid, quien tenía la extraña experiencia de ver imágenes objetivas en la bola de cristal e investigó la casa atormentada de Ballechin en Perthshire, Escocia. Por consiguiente, publicó dos artículos en Proceedings: "On Alleged Movements of Objects without Contact, occurring not in the Presence of a Paid Medium" ("Presuntos movimientos de objetos sin contacto que ocurrieron en presencia del médium Paid")(Vol VII, Parts XIX-XX., 1891-92). De todos modos no le entusiasmaban los fenómenos físicos. Fue debido a su desaliento con aquella Sra. Thompson, cuando dejaron de sentarse para demostraciones físicas y se centraron en el desarrollo principalmente como médium de trance en el SPR. Tuvo su recompensa. La comunicación recibida por la Sra. Thompson finalmente confirmó su creencia en la supervivencia. Antes del Congreso Internacional de Psicología en 1900 leyó un escrito sobre sus experiencias.

James Roberson llamó la atención a algunas omisiones notables en el gran trabajo de Myers en una carta impresa en Light , el 30 de mayo de 1903. La razón fue que Andrew Jackson Davis sólo fue nombrado como una observación diciendo que “un examen claro, imparcial de la vida y las escrituras de este extraordinario hombre le había dado más que todo lo que había recogido en las declaraciones en cuanto a la desintegración de la personalidad, el hipnotismo, el trance, la posesión, etc.”

Después de la muerte de Myers una inundación de comunicaciones fueron dejadas por su espíritu en muchos médiums. Los más importantes fueron aquellos recibidos por la Sra. Piper, la Sra. Verrall y Sra. Holland. En cuanto a Frank Podmore, y la Srta. Alice Johnson conviene que fue el control de Myers creado por el yo subliminal de los médiums. Las opiniones expresadas en esos casos eran ajenas a la mentalidad de la vida de Myers. La Sra. Verrall obtuvo el contenido de una carta sellada, que Myers había escrito en 1891 y había dejado al cuidado de Oliver Lodge para la prueba. Sin embargo, cuando la carta fue abierta en 1904 el contenido fue encontrado completamente diferente. En 1907, Eleanor Sidgwick obtuvo buenas pruebas de identidad a través de la Sra. Piper. La Sra. Verrall hizo algunas preguntas y que la Sra. Piper no sabía las respuestas, y recibió las respuestas correctas en cuanto al contenido de la última conversación ocurrida con la Sra. Sidgwick y Myers. Muchas otras impresionantes indicaciones de su supervivencia fueron encontradas en la correspondencia cruzada, que se produjo con la Sra. Piper, en Gran Bretaña, 1906-07. El sistema de correspondencia cruzada parece haber sido elaborado por él y la recepción de conocimientos de literatura clásica transmitida en fragmentos a varios médiums, y luego unidos como un todo, levanta una fuerte presunción de que emana de la mente de Myers. La evidencia más asombrosa de la naturaleza fue obtenida por la Sra. Piper a su vuelta a América, con el Sr. G. G. Dorr, en 1908. Podmore lo considera “quizás la evidencia más fuerte de la identidad de cualquier comunicador. “ En el Camino a la Inmortalidad (The Road to Immortality) que fue producida por Geraldina Cummins es una visión abierta por F. W. H. Myers de la progresión del alma después del estado de la muerte. En cuanto a la paternidad literaria del libro, Oliver Lodge recibió el testimonio independiente de la Sra. Leonard de la comunicación de Myers con la Srta. Cummins. Oliver Lodge no ve ninguna razón de disentir de ésta opinión en lo relatado en cuarto, quinto, sexto o séptimo lugar, ya que “esta ideas puede que F. W. H. Myers las haya formado desde entonces hasta ahora (1932)

Fuente: ( con modificaciones menores)  An Encyclopaedia of Psychic Science by Nandor Fodo r (1934).     



Artículo original en inglés



LA PERSONALIDAD HUMANA - LIBRO - Frederic W. H. Myers