Una prueba instrumental post-morten
Cómo se puede eliminar la telepatía
Las cartas selladas que se abrirán después de la muerte en
caso de que una comunicación con un espíritu a través de un médium revele el
contenido, rara vez han tenido éxito en el pasado. El hecho de que son pruebas
de explicación por telepatía fue demostrado por un caso en el que el mensaje
fue revelado obtenido antes de que muriera el escritor de la carta. Esto se
citará contra la prueba si alguna vez se convierte en un éxito completo.
Por esta razón, la prueba post mortem instrumental que
sugiere el Dr. Carrington en el Boletín I
del American Psychical Institute, que revisamos la semana pasada, es de
gran importancia. Hablando de las pruebas de asociación combinadas con un galvanómetro,
el Dr. Carrington escribe:
"Se nos ha ocurrido que pruebas como las descritas
anteriormente serían un excelente medio para establecer la identidad post
mortem. Permita que cualquier individuo, cuando aún vive, se someta a sí mismo,
media docena de veces, a una prueba con una lista de palabras unido a un
galvanómetro, para establecer una serie promedio de reacciones y respuestas;
deje que éstas se sellen cuidadosamente y se depositen en alguna caja fuerte, o
en los Archivos de la API.
Cuando se dé el caso de que esa persona quiere comunicarse
post mortem, se podría someter a las mismas pruebas y comparar las dos (las
reacciones del médium también deben ser medidas, por supuesto, al mismo
tiempo).
Si las dos series de pruebas antes y después de la muerte, muestras
sorprendentes similitudes -y, al mismo tiempo, es radicalmente diferente de las
reacciones del médium- deberíamos tener aquí una prueba sorprendente de
identidad que difícilmente podría ser igualada por cualquier otro método de
investigación u obtenida de otra manera".
Para eliminar como la causa de la telepatía es un factor
causal, estas pruebas podrían realizarse de manera tal que el registro antes de
la muerte del sujeto pudiera registrarse en los instrumentos instalados para
ese propósito, en una sala sellada preparada especialmente para este tipo de
experimento. La lista de palabras de estímulo podría darse mecánicamente, y los
tiempos de reacción del cronómetro, así como las desviaciones galvánicas que
acompañan a las palabras de reacción, podrían registrarse mecánicamente (por
ejemplo, en un dictáfono o por el propio sujeto) y estos registros archivados
en una bóveda de depósito seguro, evitando así que cualquier otra mente viva
tenga conocimiento de los registros de reacción de este sujeto.
Luego, cuando el sujeto muriese, y (en teoría) volviera a
comunicarse, post mortem, la única mente que había dado sus reacciones antes de
la muerte ya no estaría "viva". "Esta forma de asegurar un
registro antes de la muerte, resultaría
en un 'registro de personalidad' conocido por ninguna mente viva, y uno que
podría ser sometido a una prueba experimental precisa cuando ese mismo
individuo pretendiera comunicarse después de la muerte".
Nandor Fodor
Light, 27 de oct de 1933
**
Nota: La prueba que se plantea a la luz de la actualidad es
la siguiente: Una persona cuando está viva, se conecta a un galvanómetro,
mientras que se le nombra palabras. Estas palabras producirán una reacción en
la persona, por ejemplo, se le dice “perro” y la persona reaccionará de una
determinada manera hasta ese momento dado que la palabra tiene connotaciones y
significado en su mente. El aparato de la “máquina de la verdad” o
galvanómetro, lo que recoge es el impulso eléctrico de esa persona. De esta manera,
la persona antes de morir habrá dejado la respuesta eléctrica a ciertas
palabras. Una vez que haya muerto, si se manifiesta a través de un médium, el
médium bajo la posesión del espíritu anterior debería mostrar las mismas
respuestas eléctricas a esas mismas palabras que cuando estaba en vida.
**
Galvanómetro
Forma de medir con el galvanómetro
Ejemplo de la comparación del registro galvanómetrico
