Charles H. Foster
Charles H. Foster (1838-1888), médium americano de carrera
accidentada. Fue presentado en el Adivino de Salem, su entusiasta biógrafo,
Geroge C. Gartlett, quien dijo que era el mayor médium ya que Swedenborg había
exagerado, pero parece que él tuvo poderes singulares. Los inicios de su
mediumnidad se notaron ya a la edad de 14 años. Durante el horario escolar se
oyeron golpes en su escritorio. Por la noche era despertado por ruidos
violentos, el mobiliario fue sacudido por la habitación. Algún tiempo después
el fenómeno empezó a ocurrir a plena luz del día y el mobiliario se oyó moverse
por las habitaciones que estaban vacías. La escritura en la piel y la lectura
en bolitas de papel fueron las características especiales de su mediumnidad.
Ambos fueron temas de discusión de vivas controversias. De acuerdo con una
divertida historia contada en su biografía, en una ocasión fue rudamente
agarrado por el brazo cuando se producía la escritura en su piel. Dos hombres pidieron
que la prueba fuera a plena vista. Mientras lo sujetaban, en caracteres grandes
y redondos las palabras aparecieron en el brazo del médium: “Dos tontos”. Las
letras eran de color rojo sangre, y según la regla aparecía el nombre del
espíritu comunicante. Aparecieron mayormente en el antebrazo de Foster. Las
bolitas de papel, su procedimiento era habitual, pedían a los asistentes que
escribieran los nombres de sus familiares fallecidos en trozos de papel
mientras que él estaba fuera de la habitación, que las mezclaran y añadieran todas las
bolitas en blanco que quisieran y las pusieran en un montón encima de la mesa.
A su regreso los nombres en las papeletas fueron transmitidos mediante golpes y
él recogía la bolita escrita, dando direcciones mientras estaba en trance y
descripciones mediante clarividencia y clariaudiencia de los espíritus. Afirmó
que Virgilio, Camoens, Cervantes y muchas otras entidades ilustres estaban
entre sus comunicadores.
En 1861 Foster visitó Inglaterra. Su primera sesión se dio
en la casa de William Wilkinson, el editor de la revista The Spiritual
Magazine. Se hizo amigo de Lord Lytton con
quien quedó en Knebworth. Dickens, Thackeray, Tennyson, Robert Chambers y
William Howitt tuvieron sesiones frecuentes. El Dr. Ashburner registró
fenómenos poderosos. Vio nueve manos materializadas flotando sobre la mesa del
comedor y fue testigo de la levitación del médium y de un piano en el cual
estaba tocando.
En Enero de 1862, por invitación de Thomas P. Barkas, dio
cuatro sesiones en Newcastle-upon-Tyne. En cada una participaron diez personas.
Sus nombres se mantuvieron escritos en un libro privado y ocultados al médium.
Con los errores de las comunicaciones que tuvo con estas cuarenta personas no superaron
3% y por lo general ocurrían durante alguna confusión o alguna insignificante
controversia. Sin embargo, Barkas tenía la impresión de que a pesar de que
Foster era un médium genuino, de vez en cuando, tal vez con frecuencia,
agudizaba los efectos producidos introduciendo algún truco o engaño. En apoyo de esta suposición señala
en sus Outlines of Ten Years Investigations into the Phenomena of Modern
Spiritualism que los nombres de
los espíritus difuntos eran escritos por el médium de acuerdo con la ortografía
en las bolitas de papel, que a veces estaban mal escritas, las comunicaciones
eran extraordinariamente similares, su rápido trance y el alivio repentino era
más probable aparente que real y la
escritura, ya sea obtenida directamente o de forma automática, siempre se
parecía a la escritura normal del médium.
El sentimiento fue
convirtiéndose poco a poco contra Foster. En 1863 la The Spiritual
Magazine declaró que el editor había
recibido del juez Edmonds esos “Los detalles de su criminalidad enferma de
manera que no deberían tocar más en esas páginas nada de su médiumnismo
físico”. Es decir que no podíamos poner en publicación nada relacionado con su
médiumnismo físico”. Se fue a París, se presentó ante Napoleón III, visitó
Australia y regresó a Nueva York. Epes Sargent registró experiencias personales
convincentes en la lectura de bolitas de papel en su Planchette, or the
Despair of Science. Por otro lado, Truesdell en Bottom Facts of
Spiritualism nos habla del descubrimiento de un fraude en 1872 en Nueva
York. Él palpó las bolitas y las leía mientras que re encendía su cigarro
mientras el fósforo era sostenido en el hueco de su mano. En los posteriores
años se convirtió en un adicto al alcohol y murió en el delirium tremens.
Enciclopedia de Ciencia Psíquica - Nandor Fodor
Foto simulada donde aparece la escritura en piel - No es C. H. Foster.
Para saber más puede visitar la entrada: El capítulo 7: En su Cuerpo los Autografos de Gente Invisible - Nandor Fodor