EL SEGUNDO CONGRESO INTERNACIONAL DE INVESTIGACIONES PSÍQUICAS EN VARSOVIA (1923)
(Aparecido por primera vez en “Psychischen Studien”, noviembre de 1923 (del 29 de agosto al 5 de septiembre de 1923)
Aunque las condiciones externas en las que se realizó el Segundo Congreso de Parapsicólogos de todos los países del mundo , en Varsovia, hacia finales de agosto de este año, no eran favorables por hallarse Alemania en una situación económica precaria y por su política alterada, ese congreso tuvo un cariz internacional, pues la mayor parte de los países estaba representada por uno o varios sabios. Lamentablemente la mayoría de los participantes alemanes que habían anunciado conferencias, anularon los compromisos debido a la catastrófica caída del marco alemán. Esos profesores fueron: Oesterreich, Zimmer, Gruber, el docente privado doctor Schayer, los médicos berlineses doctores Sünner, Bruck, Schwab y Kröner. Finalmente Alemania quedó representada sólo por el doctor barón von Schrenck-Notzing (Munich), el ingeniero Grunewald (Berlín) y el doctor Neumann (Baden).
También de Francia llegaron solamente dos delegados: el doctor Geley y René Sudre, los cuales no se amilanaron ante el viaje de cuatro días por el Mar del Este hasta Danzing, y de allí a Polonia.
En representación de Inglaterra encontrábanse los señores Dingwall y Price (Soc. F. Psych. Res.). A Estados Unidos lo representaron el doctor Gardner y Murphy, a Italia el doctor Mackenzie, a Holanda el doctor en filosofía J. T. W. Brugmans; además presentárose al congreso el profesor Alruz (Suecia), el profesor Wereide (Noruego), el profesor Blacher (Riga), el profesor Nielsson (Islandia), el doctor Oberhummer (Viena), el señor Carl Vett (Dinamarca), el doctor Tigerstedt (Finlandia). También España, Turquía y Checoslovaquia enviaron cada una su representante.
El comité polaco, que acumuló muchos méritos en la organización de ese amplio congreso, estaba presente en su totalidad: los profesores Gravier (Varsovia), Chojecki (Lublin), Kawacki (Varsovia) y Witwicki (Jefe del Instituto Psíquico de la Universidad de Varsovia), el príncipe Lubomirski, el doctor Sokolowski, y finalmente una dama, la doctora en filosofía Jeanne Garczynska, que contribuyó ampliamente al éxito total, como incansable y sacrificada organizadora.
El 29 de agosto, antes del mediodía, tuvo lugar la solemne apretura del congreso, formado por centenares de personas en el aula de la Universidad de Varsovia, ricamente decorada con plantas. El rector, representantes del presidente de la nación, del ministerio del culto, de la ciudad y del mundo médico, dirigieron discursos de bienvenida a los visitantes. El grupo presencial elegido por el congreso, estaba compuesto por las siguientes personas: doctor Mackenzie (Italia), profesor Gravier, presidente de la Sociedad de Investigaciones Psíquicas de Varsovia, y el profesor Witwicki, como representante de la universidad, en cuyo recinto se realizaba el congreso. Se fijó el 30 de agosto para las conferencias en idioma francés, el 31 de agosto en inglés, el 1º de septiembre en alemán, y el 2 de septiembre para los informes en idioma polaco.
Las comunicaciones francesas comenzaron con el doctor Gustave Geley, quien se refirió a una larga serie de sesiones, realizadas, con el médium físico Jean Guzik (de Varsovia), en el Instituto de París para las Investigaciones Metafísicas. Aquellos ensayos tuvieron por objeto convencer a una serie de destacados representantes del mundo científico francés acerca de la realidad de la telecinesia. El éxito fue completo, como lo demostró la declaración pública en “Matin” y firmada por unas 30 personas (prueba elocuente de la autenticidad de los fenómenos)
Luego siguieron las conferencias de René Sudre: “El espiritismo y el experimento”; del doctor Mackenzie (Génova): “Una consideración biológica y relativista de los fenómenos supranormales” ; del doctor Brugmans (Holanda): “El estado pasivo de un telepático controlado por el fenómeno psicogalvánico”; de Tigerstedt (Finlandia): “Experimentos de clarividencia y telepatía”. Además se leyó el informe de Madame Juliette Bisson titulado: “Acerca de los experimentos realizados en 1922 en la Sorbona con Eva C.” Este informe criticaba a los experimentadores que habían motivado en parte el resultado negativo.
El señor Dingwall abrió el día dedicado a las conferencias en inglés con una exposición acompañada de fotografías, sobre el tema: “El estado actual de la llamada fotografía psíquica” (aparición de imágenes de personas fallecidas en las placas fotográficas tomadas de sujetos vivos). Señaló la confusión de esas investigaciones, y demostró con qué facilidad tales imágenes pueden reproducirse mediante artimañas engañosas. Todavía no se ha dado una prueba científica de su autenticidad, aunque las circunstancias de casos aislados no excluyen esa posibilidad.
Le siguió un informe del profesor Sidney Alruz (Suecia): “Acerca de la psicología y fisiología del llamado estado de trance”. El profesor Haraldur Nielsson (Islandia) habló sobre un caso de poltergeist, y W. Barett: “Acerca de las manifestaciones luminosas del imán en relación con las observaciones hechas por el barón Reichenbach en su estudio de los sensitivos”. Finalmente se leyó un informe de Mr. Henry Sidwick: “La telepatía experimental y la necesidad de nuevos experimentos”.
La serie de conferencias alemanas la encabezó el doctor barón von Schrenck-Notzing (Munich) con una conferencia ilustrada con fotografías: “Acerca de los métodos empelados en los ensayos realizados con el médium Willy Sch.” Se añexó a esa conferencia la segunda parte de un experimento de clarividencia que el doctor von Schrenck había comenzado en la tarde del día anterior con Stephan Ossowiecki. Ese famoso clarividente dio a los presentes en la sesión del 31 de agosto, el contenido desconocido de la carta sellada que había sido preparada en Londres por el señor Dingwall, que no tomaba parte en ese experimento , y que la proporcionó en calidad de préstamo al doctor von Schrenck para la conferencia.
Durante la reunión se leyó en primer término el informe d ese ensayo tomado por el doctor Geley con los datos de Ossowiecki, acerca del contenido de la carta. Después Dingwall declaró que aquella le fue devuelta y que se encontraba intacta; el psicólogo de Varsovia, profesor Witwicki, la abrió en presencia del congreso reunido para verificar los datos de Ossowiecki: el contenido real de la carta concordaba exactamente con los datos del clarividente, acerca de los cuales informaba Geley. Este gran éxito se recibió con aplausos.
La conferencia que pronunció luego el ingeniero berlinés Fritz Grunewald, versaba sobre: “La materialización de la energía mediumnística bajo la influencia de la voluntad consciente”.
Tratábase en ella acerca de la inpregnacióon de un terrón de azúcar pro la influencia mediumnística. El médium sostiene en su mano cerrada, durante un rato, el terrón de azúcar. Cuando se le echa en el agua, se disuelve convirtiéndose en una masa esponjosa del tamaño del terrón de azúcar. El segundo informe ofrecido en la tarde del 1º de septiembre por el mismo conferenciante se refiere a las “Influencias telecinésicas sobre una balanza encerrada en una caja de vidrio”. El Sr. Carl Vett (Copenhague) defendió en su exposición, titulada “Caminos y métodos de la investigación psíquica”, el punto de vista de que el mediumnismo era una manifestación atávica, que en ella se trataba en el mejor de los casos de manifestaciones automáticas y jamás de manifestaciones reales de la vida anímica de los muertos; hasta posiblemente sólo se trataría de una influencia de los poderes diabólicos. Si se deseara llegar a un entendimiento de los fenómenos supranormales, no debe procurarse un estrechamiento u oscurecimiento del consciente, sino más bien, conforme con el arcaico concepto indio, de una elevación del mismo (quiere decir un plano más elevado del consciente).
El final de los días destinados a las conferencias en alemán lo señaló la lectura de un trabajo enviado por el profesor doctor Konstantin Oesterreich acerca del “Significado filosófico de los fenómenos mediumnísticos”.
El congreso resolvió hacer publicar 100 ejemplares con las exposiciones del sabio de Tübingen, quien analizó con justeza y severa objetividad todas las teorías en torno del problema, inclusive el concepto espiritista.
El día polaco ( 2 de septiembre) fue inaugurado por el ingeniero Iebiedzinski (Varsovia) con su disertación sobre el tema: “Ideoplastia como la hipótesis más importante para el estudio de los fenómenos metafísico”. Este orador, posiblemente el más experto en cuanto a experiencias hechas con médiums de todo tipo, no había podido obtener en todos su numerosos ensayos una prueba de la objetividad de los extintos con los fenómenos o las denominadas personificaciones mediumnísticas, sino detiene el concepto que ¡La variabilidad y carácter de las formaciones producidas por los médiums, no son sino el producto de aquellos conceptos, hipótesis y teorías que dominan en todos los casos al médium y el círculo en que se encuentra”. Por consiguiente, las manifestaciones mediumnísticas serían un reflejo fiel de los conceptos acertados o falsos de los experimentadores y los médiums. Es probable que la ideoplastia sea capaz de reproducir en el proceso de materialización todo aquello que puede crearse con la imaginación humana. Jamás podrá obtenerse mediante esos renombrados “espíritus”, alguna aclaración en cuanto a problemas de índole científica.
“El estudio de los problemas psíquicos de mediumnismo” era el tema que eligió para su discurso Prosper de Szmurlo (Varsovia). Este sabio recomienda el procedimiento hipnótico y psicoanalítico para la educación de los médiums, hasta llegar al nivel de la clarividencia.
El señor Grudzinsky-Gralski (Cracovia), se ocupa en su informe sobre la metagrafología, la escritura automática de la cual no puede deducirse la existencia del espíritu. Analiza los diferentes métodos de la grafología científica y llega a la conclusión de que, por ejemplo, los experimentos del clarividente vienés Schermann (psicoscopía) no pueden explicarse por los métodos conocidos, sino que como en el caso de Ossowiecki, se basan en un talento adivinatorio especial.
La presente no es una recopilación de las principales conferencias del congreso, entre las cuales no se encuentra un solo trabajo de tendencia espiritista o supersticiosa. Además se incluye la colaboración e los representantes oficiales del gobierno y la ciencia polaca. Todos ellos proporcionaron salas en el primer establecimiento de enseñanza superior del estado, y saludaron personalmente a los visitantes extranjeros.
Esto demuestra que la parapsicología concentra sobre sí una atención cada vez mayor, y que crece paulatinamente hasta alcanzar el nivel de una nueva y reconocida rama de la ciencia. Acaso más importantes que los discursos y las polémicas son las relaciones personales que surgen de tales ocasiones, así como el trabajo práctico realizado tras las bambalinas.
Los participantes tuvieron a su disposición durante la semana del congreso , no menos de cuatro materializaciones-médiums y dos clarividentes, de manera que hubo numerosas ocasiones para reunir experiencias personales.
El conocido médium profesional Guzik realizaba sesiones diarias para los congresistas, en las cuales tomaba parte de 6 a 8 personas.
Inolvidable y por encima de todo elogio en la hospitalidad polaca que se nos ofreció, en brusco contraste con la modalidad áspera, hostil y de corte militar con que los funcionarios aduaneros alemanes desempeñaban sus funciones en la frontera. A los viajeros que llegaban al lado polaco, y una vez que presentaban sus tarjetas de entrada al congreso, se los recibía del modo más amable, sin que se les revisara su escaso equipaje y de inmediato se les proveía de pasaportes sin la menor dificultad. En la estación de Varsovia se había instalado un pequeño escritorio, en el que se indicaba su alojamiento a cada uno de los recién llegados . Veinte habitaciones desocupadas estaban a disposición de los sabios, llegados de países pobres en divisas. También las entradas al congreso les fueron cedidas por un precio notablemente reducido.
Como lugar para un encuentro extraoficial de los participantes, se reservó para todas las noches un club de Varsovia.
El domingo 1º de septiembre se organizó un viaje en automóvil (100 km) a través del país, que culminó con la visita al castillo del duque Radeziwill. Los coches fueron puestos a disposición del congreso por particulares, y en parte por la aristocracia polaca. En el portón del casillo el duque, con toda su familia, dio la bienvenida a los miembros del congreso; los agasajó en su maravilloso y viejo parque y les mostró el castillo enriquecido con antiguas obras de arte, que le daban el carácter de un museo. Por la noche se ofreció a los visitantes uan función de gala en el teatro estatal de Varsovia.
Aquellos días permanecerán por mucho tiempo en la memoria de los participantes del congreso, como grato recuerdo de sus amables anfitriones.
(Problemas básicos de la parapsicología – Albert Freherr von Schrenck-Notzing)
