Ataque Injustificado y Manipulación de la Información de W. Crookes
En el libro “POPULAR SCIENCE MONTHLY” de 1874, volumen IV, en la página 75 empieza un artículo llamado “Hipnotismo en Animales” escrito por el Prof. Joseph Czermak, de nacionalidad alemana.
Éste es uno de los numerosos artículos de la época que merece la pena leer, tenemos un ataque injustificado hacia W. Crookes, R. Hare, A. R. Wallace,… y en general un ataque hacia la “fuerza psíquica”, para ello arremete sin piedad y sin justificar nada, se limita a decir que todo esos experimentos están realizados por gente si experiencia, y los investigadores simplemente son engañados.
No se molesta en proponer como se hicieron los trucos, simplemente dice que estos ilustres científicos no son nadie para afirmar tales cosas. A todos estos ataques se tuvieron que enfrentar en aquella época, y todavía en ésta hay muchos que les encantaría recoger el testigo y las palabras de estos positivistas cerrados, que si por ellos fuera, el hombre todavía seguiría viviendo en las cavernas.
Antes de traducir esa parte, quiero hacer mención sobre el montaje que presenta el artículo y compararlo con el que hizo W. Crookes:
En la figura A vemos el verdadero montaje de W. Crookes, una tabla de caoba, en un lado sujeta por un dinamómetro, y en la otra, apoyada en una estructura, aunque no se aprecia en ese dibujo, la tabla está apoyada encima de una barra en forma de cuña, pero está muy pegada al borde de la tabla de caoba.
El médium, en este caso D. D. Home colocaba la punta de los dedos en el extremo de la tabla, sin sobre pasar unos centímetros del borde, y la tabla bajaba y subía; a veces ni siquiera tenía que tocar la tabla.
En el caso de la figura B, el montaje es parecido, pero falso. El autor del artículo añade y modifica el experimento sin el más mínimo pudor. Aparece un montaje chapucero. Para empezar a una mesita le añade ruedas, la tabla apoyada en la mesita baja tiene el punto de apoyo muy desplazado hacia el centro, de manera que la palanca cambia, la línea de caída del dinamómetro está inclinada, la mesita es baja, no dice donde el médium pone las manos, y en cualquier posición que se ponga el médium, tal y como está puesto el dibujo da la sensación de que puede hacer trampas de muchas maneras. La mesita tiene ruedas para moverse, los objetos están cerca del suelo para que el movimiento de las piernas pueda actuar. O un simple movimiento de la mesa o de la tabla hacia delante o atrás produciría que la balanza cambiar su lectura. Pero el caso es que ese montaje no es de Crookes.
El punto de apoyo está bastante desplazado para hacer palanca y fuerza moviendo así la tabla.
En cualquier caso el montaje A y otros está bien supervisado y preparado por Crookes y sus colaboradores, en cambio el montaje B no es de Crookes y está dibujado con mala fe y atribuido a Crookes con el ánimo de desprestigiarlo.
Pasaré a la absurda justificación de Prof. Joseph Czermak, en la parte que habla de la “fuerza psíquica” para que vean que absurdo pueden ser algunas personas:
“Nos remite a la triunfante ‘investigación’ de Hare, Crookes, Butterow, y otros bien conocido “Investigadores naturales.
Sin embargo, el examen de esta literatura asombrosa, parece ser la confirmación de sus ideas, la forma en que sólo estos “investigadores” realizan sus experimentos y la forma en que darán sus informes demuestran claramente que realmente no han investigado en todo. Para dar un ejemplo notable de Crookes anunciaba que había descubierto una nueva fuerza en la naturaleza, la cual él llamó “fuerza psíquica”.- A través de la influencia de esta fuerza, de acuerdo con Crookes, el peso de un cuerpo puede aumentar o disminuir en varios kilos, ¡sin intervención visible!.
¿Y cómo cree usted que cree Crookes que ha investigado y publicado esta maravillosa circunstancia? Que no se considere posible, cuando digo que lo que hizo fue simplemente darse cuenta, en presencia de ciertas personas, que un resorte de balancín, que se utiliza para pesar, dio movimientos de causas que no eran evidentes.
Yo aquí le mostraré un pequeño dibujo, de modo que usted pueda entender la ilustración de cómo funcionan los aparatos de Crookes.
El B es una tabla sólida de caoba en medio hay una punta afilada colocada en la parte de abajo, mientras que el otro extremo está sujeto a la balanza W, que cuelga suspendida de un gancho hasta G. El índice de la balanza muestra cómo el gran peso es el que tiene que soportar.
Cada movimiento hacia atrás o a delante, cualquier sacudida o empuje se comunica al índice, en presencia de todos, cuando el Sr. Home, médium director, no se movía el aparato en absoluto, pero se mantuvo firme con los brazos y los dos pies, a una distancia del mismo, ¡Eso es todo!. Crookes expresó su monstruosa afirmación sobre la base de que el equilibrio y los movimientos no parecían tener ¡ninguna causa física!
El que esté satisfecho con las afirmaciones generales de Crookes, en este sentido, manifiesta una incapacidad relativa para la ciencia, simplemente no tiene derecho a hablar de esas cosas.
Podemos aceptar, como hecho real la evidencia de Crookes, que el equilibrio realmente cambiaba con algunos movimientos en presencia de los llamados médium, pero cuando Crookes representa como un evento real la “fuerza psíqucia”, siendo el medio por el cual se causó estos movimientos y alteraciones considerables del peso de un cuerpo, que es, a pesar de todo persuasión, ninguna circunstancia real, sino un afirmación bien intencionada “Un evento considerado desigual”, una afirmación que no merece la menor creencia ni la menor cantidad de consideración.
Esta afirmación no se merece lo último, porque se trata de un evento visto desigual, (Porque hay muchos eventos de esta categoría que merecen la más alta estima), sino por la parte admisible de Crookes que declara que no es digno de ningún aviso, y no porque la menor presencia de la prueba de los movimientos sólo procedía de los llamados médiums, y ¡no había ninguna otra causa natural que actuara! Tenía pruebas llevadas a cabo.
Si la prueba se hubiera efectuado de la manera exacta, las afirmaciones de Crookes probablemente hubieran merecido algún tipo de notificación, lo que hubiera dado lugar a una repetición de su experimento con el fin de probarlo más a fondo su “evento considerado desigual”
Si esta prueba hubiera sido estrictamente forzada, Crookes habría descubierto uno de los más notables hechos conocidos, y sus afirmaciones tendría en mayor respeto y consideraciones de todos los investigadores naturales, como tal vez Yolta, cuando construyó su pila, que presentó con no menos ¡apariciones increíbles!
Pero, como los eventos de pie, las declaraciones de Crookes al igual que los cientos de miles de “acontecimientos vistos desiguales” sobre el movimiento de mesas, guitarras volando, pianos que tocan solos, etc. ha sido considerados como si tuvieran el mismo derecho que la ciencia siendo el mejor y más asombroso truco de actuación de manos, que no se puede permitir una investigación real natural, aunque en un sentido psicológico la verdadera causa de la decepción puede ser interesante.
Poco lo que puede afectar a un hombre razonable, no será capaz de investigar un bonito truco y sorprendente magia, así que también no debe haber nadie que inquiete a sí mismo a causa de los acontecimientos que cientos de personas han testimoniado, incluso cuando la más mínima prueba de ello sea producido, porque todos los pensamientos relacionados con la posibilidad de tal naturaleza el fenómeno será eliminado.
Sólo a través de la idea de que los fenómenos no son visibles, hace que esto últimos presenten una importancia mayor en los ojos de los ignorantes.
Pero, en este significado que no hace ninguna diferencia entre esto y la magia, que es a menudo mucho más interesante y no menos inexplicable.
Pero ¿hacer una distinción en cualquier aspecto?
En cuanto a que vamos a pedir, en un primer momento, un poco de información de los “espiritualistas”
“La investigación natural” y los “sabios” como Yarley, Wallace, Crookes, Butterow, y otros, antes de tener el derecho a hacer ciencia sin el más mínimo reproche al respecto, y a la dependencia de estas cosas sobre ella.
Estos señores no tienen ni la sombra de un derecho a quejarse de cualquier cosa para salvar su incapacidad, ni tienen derecho a hacer un reproche a nadie excepto a sí mismos, que no tuvieron éxito en establecer sus “manifestaciones espirituales”.
Expresamente se hará hincapié en el hecho de que yo no he dicho que uno debe considerar todos los fenómenos que ocurren a diario, y que son de la mayor significación e importancia, como una mera prestidigitación de trucos, aunque el número de ellos puede probar que lo son. Recordar el ¡escándalo de los Davenport! Para mí son las primeras “manifestaciones” debidas a la poca consideración de éstos últimos y que fueron seleccionados como auténticos cuando se compararon con los experimentos de Crookes, como un ejemplo característico de lo espiritual.
La literatura de los sabios conocidos ingleses, eruditos merece nuestro gran respeto el químico Hoffman, de Berlín, antes de Londres. Y tiene uno de los señores que están “investigando” en este departamento, ¿dijo que cualquier cosa para el crédito del químico americano, Dr. Hare? ¿No recuerdo uno en la literatura que tiene la seguridad de referirse a nosotros, acompañado del castañeteo de descerebrados y de derrames fantasiosos?, nada en absoluto, pero ¿los arreglos infantiles o idiotas suponen que representa un apartado psicológico y más informes menos meritorios en cuanto a la realidad de los acontecimientos desiguales?
Mientras tanto, que bien puede preguntar si estos acontecimientos han sido presenciados por cientos de personas dignas, son necesariamente un examen científico y si la prueba vale la pena.
Oh, sí, pero no todos, y no en grado elevado. La ciencia y sus seguidores tienen el derecho de consultar a su propio tiempo y oportunidades.
Ellos tienen algo más que hacer que ocuparse en responder cada pregunta de ellos mismo. Todos ustedes conocen el viejo dicho sobre el tonto y los siete sabios. Lo que es digno de no ser investigado, y que, sin embargo, puede despertar la autoestima y la confianza a pesar de toda singularidad, debe plantear no se considerado por parte de la ciencia. En este caso, sin embargo, las mesas en movimiento, guitarras voladoras, golpes misteriosos, por supuesto no toman parte.
El clamor de cientos de miles de testigos oculares y del oído, triunfalmente se apuntan a las “investigaciones científicas”, pero son incapaces de dar alguna prueba de sus experimentos, no cambian el asunto en lo más mínimo.
Ya será uno u otro investigador puede considerar estas cosas, totalmente independiente de su opinión personal, y circunstancias causales. Él no tiene opinión al respecto, mantiene un margen de ello, no pude cumplir con el más mínimo reproche.
Mi estimado amigo, profesor Sharpey, que anteriormente fue secretario durante muchos años de la Royal Society de Londres, tenía razón cuando se negó a la invitación del Sr. Crookes para estar presente durante los experimentos, con el Sr. Home, de hecho, actuó con gran sabiduría para los espiritualistas y los fanáticos están muy inclinados a tocar las trompetas en tales ocasiones cuando hay hombres de ciencia como testigos.
La carta del célebre astrónomo Huggins, escrita el 9 de junio de 1871 al Sr. Crookes es una cortés y decidida negación a su opinión en relación de los diferentes fenómenos tenidos con Home en su presencia.
Y, sin embargo en esta carta, Huggins, probablemente contra su voluntad, se considera desde todos los lados, como una “autoridad científica” que entregado su testimonio en cuanto a la realidad de los escritos espirituales, manifestaciones sobrenaturales, etc,. ¡Juzgen ustedes mismo!
Para preservar el honor d eHuggins, y como ejemplo notable de estos procedimientos de caballeros, se vieron obligados a comunicar esta carta dudosa para usted:
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Sr. Crookes: TJppee Sclse Hill, Junio 9, 1871.
Las hojas de prueba que nos envía parecen contener una correcta representación de lo ocurrido en su casa, en mi presencia. Mi posición en la mesa no me permitió ser testigo de la eliminación de la mano del Sr. Home del piano, pero esto es considerado por usted, así como la persona que se sienta al lado del Sr. Home que tuvo lugar. Los experimentos muestran la importancia de la investigación.
Yo, sin embargo, deseo que se entienda claramente que no expresamos una opinión decidida en lo que respecta a los fenómenos.
Su servidor, Willian Huggins.
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Sin embargo, como hemos dicho, si uno u otro investigador científico examina estas cosas, su opinión personal es totalmente dependiente de las circunstancias. Pero, en lo que respecta a la ciencia estricta, simplemente no existe en absoluto.
La ciencia no reconoce ni les niega, sino que simplemente pasa por alto, y tiene perfecto derecho a hacerlo, porque el tiempo y el trabajo son demasiado valiosos para desperdiciarlo en los fenómenos que pueden ofrecer ningún interés, y sus causas no son evidentes lo mismo que la magia. En estos días, no hay nadie acusado de posesión de poderes sobrenaturales, de lo contrario podrían volver a comenzar a quemar a la gente acusados de herejía y brujería.
Hasta ahora, nada nos obliga a suponer que las manifestaciones espirituales y fenómenos dudosos sean sobrenaturales, y por lo tanto, todo el asunto, probablemente no vale la pena, cualquier otra consideración lo que sea, excepto tal vez desde el punto de psicología.
La oposición absoluta de la ciencia al espiritualismo, etc, es totalmente justificable, como ustedes, señores, debemos admitir, sólo puede ser satisfecha con nuestro punto de vista o todo lo que han sido engañados por las expectativas.
Sólo puedo decir que , posiblemente como consecuencia de la reserva a lo largo de la ciencia, y mucho, tal vez, con el daño a la humanidad, se mantuvo y sigue estando sin descubrir, por una parte, con modestia de la investigación natural, más que cualquier cosa, es obligado decir como Hamlet:
“Hay más cosas en el cielo que la Tierra, Horacio, que los que sueña su filosofía!
En la media medida, mientras tanto, el momento vendrá para todos los descubrimientos y cada paso del progreso.
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¡¡¡ SIMPLEMENTE ABSURDO!!!
